Luego de suscribir un acuerdo de cooperación en temas fronterizos entre ambos gobiernos, el Presidente peruano, Alan García, y su par Sebastián Piñera destacaron el momento que viven las relaciones entre los dos países, en medio del litigio en el Tribunal de La Haya.
En una extensa conferencia de prensa, que comenzó alrededor de las 12.45 horas, el Jefe de Estado peruano dijo que "un tema que nos separe se irá haciendo cada vez más pequeño, y dependerá de profesionales del derecho que finalmente dirán lo que tengan que decir".
Sin embargo, García puso énfasis en el carácter bilateral de la relación entre ambos países, y aludió, aunque sin mencionarlo explícitamente, a la aspiración marítima de Bolivia, recalcando que se trata de un tema bilateral.
"De ese tema que no se aproveche ningún tercero. Ahí está el problema. Que no se aproveche ningún tercero, porque ésta es nuestra relación bilateral de confluencia, y el tema de Bolivia y Chile es una relación bilateral entre Bolivia y Chile. Nosotros desearíamos, si hubiera alguna vez una solución, que bien, eso es lo natural, pero no intervenimos porque es un tema bilateral, y esperamos que eso se conduzca así y que todo nos siga acercando permanentemente", expresó.
Sus dichos se dan luego que el canciller boliviano, David Choquehuanca, dijera que su país "no descarta" llevar la demanda marítima en contra de Chile a organismos internacionales o instancias multilaterales, algo que causó molestia en el gobierno chileno.
JUICIO EN LA HAYA "SOBRE LA MESA"
El Jefe de Estado peruano fue consultado, también, respecto a la posibilidad de retomar el mecanismo 2+2, la cita de cancilleres y ministros de Defensa de ambos gobiernos.
Al respecto, García dijo que "por encima del mecanismo de 2+2 está el mecanismo 1+1".
"No hay mejor instrumento de confianza que el mecanismo 1+1, que es la relación directa entre el Presidente de Chile y el Presidente del Perú, y la conversación clara y transparente que ambos mandatarios mantienen sobre cada uno de los temas de Relaciones Exteriores y de Defensa, sin que esto signifique licenciar ni postergar el importante que trabajo que los ministros de Defensa y de RR.EE. cumplen", sostuvo.
"Pero, acompañado normalmente por nuestros ministros, conversamos directamente todos los temas, tenemos una fluida relación personal y telefónica, y espero que el próximo gobierno peruano continúe en esta línea de afirmación y de tratar, por el más alto nivel, directamente todos los problemas de nuestra relación", agregó el Presidente peruano.
Frente al diferendo limítrofe que se sigue en el Tribunal de La Haya, García dijo que "es muy importante aclarar también que, a pesar de cualquier litigio jurídico, lo importante es que el litigio jurídico esté sobre la mesa y no forme parte de lo que se oculta como una fantasma en cualquier cajón, viciando las relaciones".
En ese sentido, reafirmó los dichos que pronunció durante esta madrugada a su llegada al país, al decir que entre Chile y Perú se vive "el mejor momento" de las relaciones. "Creo que ambos somos conscientes de lo complementario de nuestras economías y sociedades, y de que vivimos el mejor momento de nuestra relación", comentó.
LAS PRIMERAS DECLARACIONES TRAS SU LLEGADA AL PAÍS
En horas previas durante la mañana, ambos jefes de Estado hicieron declaraciones a pesar de que no estaba previsto originalmente. En la ocasión, resaltaron las relaciones entre los dos países y se refirieron a los desafíos para el futuro.
En ese sentido, el Mandatario peruano se mostró "doblemente emocionado de estar al lado del Presidente de Chile", y sostuvo que "estoy convencido que de las conversaciones que ahora tengamos con los señores ministros y autoridades que nos acompañan, logremos profundizar esta integración que es fundamental para nuestra patria".
"No traigo ni un mensaje de recelo, jamás un mensaje de revancha. Nosotros lo que traemos es un mensaje de esperanza, de futuro y de paz fundamentalmente, para construir un mejor escenario social en nuestros pueblos", sostuvo García.
"En una economía moderna jamás debe uno tener temor del crecimiento del vecino, sino por el contrario, alentarlo y cooperar, sabiendo que de su desarrollo pueden derivarse inversiones y un mercado adicional para la producción de cada uno de nuestros países", agregó durante la mañana el Jefe de Estado limeño.
En esa misma línea, dijo estar "convencido que la alianza económica entre Chile y Perú, países complementarios, países casi espejos, va a tener enorme significación en el crecimiento del Producto Interno Bruto de los próximos años y en la generación de empleo al interior de nuestras sociedades".
Por su parte, el Presidente Sebastián Piñera dijo que "Chile y Perú tienen orígenes, tradición e historia compartida. Tenemos también un presente que nos desafía, con muchas oportunidades, y tenemos un futuro que nos convoca a enfrentar juntos las grandes tareas del desarrollo".
"Con el Presidente García hemos hecho grandes avances para que Perú y Chile puedan enfrentar juntos los desafíos del futuro", planteó.
Finalmente, dijo esperar que la visita de García a Chile "nos permita dar un paso más, con un sólo norte, que es traer una mejor calidad de vida, un mayor bienestar y una vida más plena y más feliz a nuestros pueblos".
El presidente Alan García arribó al país pasada la una de la madrugada, acompañado de una delegación de 25 personas, compuesta por el canciller José Antonio García Belaunde, el ministro de Economía, Ismael Benavides, el presidente del Poder Judicial peruano, César San Martin, y el titular del Congreso, César Zumaeta. Además, viajaron importantes empresarios de ese país.
Al momento de su llegada a Santiago, sostuvo que su visita "es una oportunidad extraordinaria, porque es el mejor momento de la relación política entre nuestros países".
Entre las actividades previstas para el Jefe de Estado peruano se incluye un viaje en helicóptero a Valparaíso, donde recibirá la Medalla de Oro del Senado, y una cena de honor, que se efectuará pasadas las 20.00 horas.
La visita del presidente Alan García, además, se produce en momentos en que está en pleno desarrollo el litigio entre ambos países por la demanda limítrofe interpuesta por Perú en el Tribunal de La Haya.