En 2008, fue Alan García quien llevó la demanda marítima de Perú a la Corte Internacional de Justicia. "Vamos a La Haya", dijo en ese momento el entonces presidente peruano, en medio de marchas nacionalistas. En 1986, durante su primer gobierno, García también había dejado sentada la posición peruana a través del "memorándum Bákula", por lo que este tema era una de sus mayores obsesiones. Antes y después del fallo de La Haya, el líder del Apra intentó posicionarse como una de las figuras claves del proceso y sus detractores lo criticaron en duros términos cuando propuso embanderar las calles del país. "Esas fueron chiquilinadas", dijo ayer, al recordar esa polémica.
"En términos personales me siento muy satisfecho, hasta alegre (tras el fallo). La decisión de llevar la demanda era riesgosa. Ante la falta de respuesta de Michelle Bachelet, tomamos la decisión de ir a La Haya", contó García ayer, en el estudio de Radio Programas de Perú, en Lima. Luego, el ex presidente (1985-1990/2006-2011) respondió las preguntas de La Tercera y dijo que a partir de ahora debe haber "más amistad, más cercanía, más inversión. ¡Me gustan los porotos con rienda!".
¿Qué opinión le merece la decisión que tomaron los presidentes Ollanta Humala y Sebastián Piñera para implementar el fallo de manera gradual?
Me parece bien. Es una decisión civilizada, de alta política, y creo que debe hacerse como ellos lo han señalado; son jefes de Estado. Se debe implementar sin ninguna condición. Simplemente, se debe ejecutar el fallo como se ha planteado por la corte. Perú y Chile son países civilizados.
En Radio Programas del Perú (RPP), usted dijo que no le gustaba la implementación gradual.
No, me refería a las condiciones. Es decir, que se diga: "Cambie usted su Constitución en el Perú, suscriba la Convención del Mar". Esos son temas que no tienen que ver directamente con el asunto de La Haya.
¿Ve probable que Perú se sume a la Convención del Mar?
Eso lo decidirá el Parlamento del Perú, porque es una decisión del Congreso, pero no veo la conexión con el tema. Mire, llame usted mar territorial de 200 millas o esté usted en la Convención del Mar, el paso inocente y libre de las naves, el derecho de pesca está consagrado y permitido. De manera que son nombres distintos que usamos.
¿Qué le parecen las señales que se han dado desde Chile en cuanto al triángulo terrestre, en cuanto a que se reconozca que ese triángulo es de Chile?
Bueno, ahí hay una opinión distinta aquí en el Perú. Pero no creo que de eso dependa el destino, la riqueza del bienestar del pueblo chileno, ni tampoco el bienestar del pueblo peruano. Es un tema de discusión de los que siempre hay entre naciones. Ha ocurrido a veces así, hasta por territorios más chicos. Lo del triángulo terrestre es un problema menor. Las cosas no se pueden hacer en las próximas 15 horas.
¿Le parece que el fallo fue justo?
(Silencio) Oiga, nosotros podríamos también decir: "Ojalá nos hubiesen dado todo lo que pedíamos", pero si los jueces así lo han decidido y eso, además, garantiza que muchos chilenos digan que por lo menos nos han dejado esto, la amistad y el trabajo en conjunto de dos países que después serán uno solo, es muy importante. Chile es un país demasiado inteligente, demasiado educado. Me parece muy bien el fallo.
¿Cómo recibe las críticas que hizo el ex Presidente Eduardo Frei sobre usted?
Uy, yo respeto y quiero mucho al Presidente Frei. Y lo entiendo. Lo que diga un hermano no me duele jamás. Entiendo que es parte de la reacción inmediata al fallo, pero lo importante es el mañana, no la reacción de las horas después al fallo.
¿Con el fallo de La Haya se pone fin, de manera definitiva, a las disputas territoriales?
Yo creo que sí. Sí, absolutamente. Aunque no crea que no me interesa el tema del triangulito.
¿Le interesa el tema del "triangulito"?
Me parece que se va a quedar ahí, pero tiene sus propios instrumentos y no es el tema básico, esencial ni grande. Si nos ponemos de acuerdo en el tema del triángulo o arbitra el presidente de Estados Unidos -creo que eso dice el Tratado del 29-, si yo fuera el presidente del Perú, firmaría algo. Espero que ya pasemos el tema y vamos a los otros. Dejemos de comprar armas. Veámonos con más confianza. Mire lo que pasó con Ecuador. Ahora tenemos una relación de cercanía total. Hay que sacar las minas de los desiertos. ¡Por Dios, entrar al siglo XXI!