"Todo lo que vamos a construir acá tiene que ser con todas las medidas de seguridad, con todo el tema urbanístico, con mejor atención de salud y mejores instalaciones. Cuando digo urbanístico me refiero a un Santa Olga 2.0. No pueden seguir viviendo como antes", dice categórico el alcalde de Constitución, Carlos Valenzuela, respecto al futuro de las localidades que fueron arrasadas por los incendios.
El edil ha descartado que en el lugar, desde donde ya se ha retirado un 50% de los escombros, se instalen viviendas de emergencia. "No queremos convertir esto en un campamento. Esta tragedia que nos mató la vida, tenemos que transformarla en una oportunidad", agrega Valenzuela.
Por ello es que se creó una mesa de trabajo entre el municipio, los vecinos, intendencia y el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, para lo que será la urbanización y reconstrucción de las denominadas zonas urbanas afectadas por los incendios: Santa Olga, Los Aromos, Altos de Morán y Nueva Esperanza.
La idea es dotarlas con instalaciones de alcantarillado, agua potable, luz eléctrica en la totalidad de los espacios, y generar más áreas públicas, soluciones de vialidad, con el pavimento de calles y veredas. "Eso no lo tenía Santa Olga y creemos que es una oportunidad de poder trabajarlo en este plan integral", sostuvo el seremi de Vivienda y Urbanismo del Maule, Rodrigo Sepúlveda.
Además, se trabajará en la creación de anillos de seguridad para aquellas zonas que están próximas a bosques o zonas de riesgo de incendio forestal, lo que se va a trabajar con las empresas del sector, "como una forma de evitar que esta tragedia se repita en los próximos 10 o 20 años", agregó el seremi.
Definen costo total
Hasta el momento el gobierno continúa realizando el catastro de cuántas familias resultaron afectadas en el sector y una vez finalizada esa tarea, se podrá cuantificar el costo que tendrá la construcción de esta nueva "ciudad", que esperan crear desde el municipio, en común con los vecinos.
Sin embargo, se trata de un trabajo que tomará tiempo. Por ello, el gobierno ha dispuesto de un subsidio de arriendo de 200 mil pesos y otro de acogida familiar, ambos con una duración mínima de dos años. La idea es que los damnificados busquen alternativas para una residencia provisoria, mientras se lleva a cabo el trabajo de reconstrucción de las viviendas definitivas. "Una vez entregada la vivienda definitiva se termina el otro beneficio (subsidio de arriendo y de acogida familiar), independientemente de lo que se demore el gobierno. Este es un tema de Estado, y seguramente va a sobrepasar el mandato de la Presidenta Bachelet, y por eso queremos dejar las bases establecidas para aquello", concluyó Sepúlveda.
La presidenta de la Junta de vecinos de Santa Olga, Mónica Sepúlveda, indicó que la reconstrucción incluirá a todos los vecinos, incluso a aquellos que no tenían regularizada su situación de vivienda o estaban ubicados en zonas de riesgo.
Mientras, se buscará restablecer, rápidamente, servicios como educación, salud bomberos y el terminal de buses, en la misma zona de la catástrofe, los que estarían a cargo de la empresa privada. Una de ellas es Desafío Levantemos Chile, que tendrá a su cargo algunos espacios comunitarios.
"Vamos a levantar una escuela modular de emergencia y recuperaremos el jardín infantil. Esos son los primeros objetivos que tenemos confirmados", sostuvo Askaan Wohlt, director operativo de Desafío Levantemos Chile. De todos modos, hoy se reunirán con la Ministra de Educación en terreno, para ver de qué forma se llevarán a cabo esas tareas.
En materia de Salud, los incendios destruyeron dos postas y cuatro estaciones médicos rurales. Para suplir estos servicios, en febrero se instalará una unidad de emergencia tipo posta modular.