El ministro alemán de Economía, KarlTheodor zu Guttenberg, considera que el desmantelamiento de puestos de trabajo en las plantas germanas de Opel será mayor de lo anunciado oficialmente por el comprador, el fabricante de componentes austrocanadiense Magna.
En declaraciones que publicará mañana el dominical "Bild am Sonntag", Guttenberg asegura que él ya informó en primavera a todos los afectados, incluida la representación laboral, de que las cifras publicadas por Magna únicamente se referían a la plantilla que trabaja en las líneas de producción, y no en la administración.
De esta forma, Guttenberg reacciona a una noticia adelantada hoy por el semanario "Der Spiegel" según la cual el plan de Magna contempla el recorte de otros 1.100 puestos en la administración, que se suman a los 3.000 anunciados en las cuatro plantas de montaje alemanas.
La entidad fiduciaria que administra provisionalmente Opel dio el viernes luz verde a la venta del 55% al consorcio formado por Magna y el banco ruso Sberbank, después de que el consejo de administración de General Motors (GM) se inclinara finalmente por ese inversor.
Los planes, que todavía deberán formalizarse en los próximos meses, contemplan que GM se quede con un 35 por ciento de las acciones y que un 10% pase a manos de la plantilla.
Las plantas alemanas serán en principio las menos afectadas por el recorte de empleo.
En total, Magna ha anunciado que tiene previsto eliminar en torno a 10.500 empleos en toda Europa.