Las fuerzas del orden francesas han recibido un mensaje de alerta por las sospechas de que el yihadista belga Oussama Atar, primo de dos de los terroristas suicidas que cometieron los atentados de Bruselas el 22 de marzo, esté tratando de entrar a Francia desde Siria, donde se le situaba.
"Le Parisien" reveló hoy el contenido de ese mensaje comunicado a los policías franceses, que tienen consignas de detenerlo, bajo la advertencia de que es un "combatiente extranjero peligroso y armado" que puede intentar llegar a Francia a través de Albania.
Attar es un viejo conocido de las fuerzas antiterroristas, del que se tiene constancia que estuvo entre Siria e Irak en 2002, y que fue detenido en la ciudad iraquí de Ramadi en 2005 con la acusación por parte de Estados Unidos de que era un combatiente contra la operación internacional allí.
Condenado a diez años de prisión, cumplió una parte de su pena en Irak, en Bucca, donde coincidió con el actual jefe del Estado Islámico (EI), Abu Bakr Al Bagdadi.
Oussama Atar consiguió volver a Bélgica en 2012, después de una campaña mediática lanzada por su familia, y un año más tarde fue arrestado por tratar de unirse a un grupo de yihadistas en Túnez. Poco después se le perdió la pista.
Es primo de Ibrahim y Khalid El Bakraoui, que se hicieron saltar por los aires el pasado 22 de marzo, el primero en el aeropuerto de Bruselas y el segundo en el metro de la capital belga.
De hecho, tras esos atentados, la policía belga trató dar con Atar en su domicilio de Anderlecht, pero no estaba allí. De hecho, se le situaba en Siria. Su hermano Yacir fue detenido con trazas de explosivos en su cara y en su ropa.