En serio riesgo quedó la materialización del polémico proyecto hidroeléctrico Alto Maipo, ubicado en la alta cordillera de la Región Metropolitana. Esto, luego que su controlador, la estadounidense AES Gener, diera a conocer que la iniciativa se encuentra en un default técnico y reconociera nuevos sobrecostos. Todo, apenas meses después de reconocer que la obra de ingeniería costaría US$ 2.500 millones, 22% más que la anterior estimación y más del doble que lo que costaba Alto Maipo al inicio de su desarrollo.
A través de un hecho esencial, el gerente general de AES Gener, Javier Giorgio, comunicó a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) que, luego que Alto Maipo SpA decidiera finalizar el contrato con la empresa Constructora Nuevo Maipo (CNM), se produjo un efecto de "default técnico", que a su vez activó negociaciones con los financistas y eventuales contratistas, las que, si llegaran a fracasar, pondrían en riesgo el desarrollo de la iniciativa.
"La sociedad está llevando a cabo diversas negociaciones con los financistas del proyecto, el contratista principal y otros potenciales contratistas para reemplazar a CNM y, además, reestructurar el contrato principal de construcción las cuales, en caso no prosperar, tendrían efectos materiales en la sociedad, por cuanto se vería afectada la continuidad del proyecto", reveló AES Gener.
"La situación descrita anteriormente, sumada a una productividad menor a la establecida en los contratos de construcción, podría generar nuevos sobrecostos, respecto de los cuáles el equipo de Alto Maipo se encuentra realizando sus mejores esfuerzos con miras a cuantificar y resolver", explicó la generadora eléctrica a la SVS.
En su comunicación al regulador, Gener señaló, además, que continúa con la construcción del proyecto que presenta 54,5% de avance, mientras se desarrollan las respectivas negociaciones.
Giorgio agregó que a marzo de 2017 el valor de los activos de larga duración de Alto Maipo ascienden a unos US$ 1.210 millones, y que el propio AES Gener ha invertido a la fecha US$ 536 millones, manteniendo compromisos de aporte de capital por US$ 83 millones. Por ahora, la entrega de la obra está fechada para 2018, aunque dado el ritmo de la construcción y este nuevo problema, eso se pone en duda.
El nuevo traspié
El 7 de junio pasado, Alto Maipo decidió tomar el control interino de las obras contratadas inicialmente con la constructora CNM, mientras sigue avanzando con las obras, aunque con un presupuesto limitado. Todo, mientras se desarrollan las negociaciones anteriormente mencionadas.
Este nuevo traspié pone en un escenario complejo al equipo de AES Gener. A fines del año pasado, la empresa puso bajo revisión el costo total del proyecto, advirtiendo que este podría escalar hasta en 22% como máximo. Por ello, activó negociaciones con las entidades multilaterales, como el IFC del Banco Mundial, conversaciones que terminaron con acuerdo respecto de cómo se distribuirían los cerca de US$ 500 millones adicionales que costaría la central. De ese monto, AES Gener comprometió aportes frescos por US$ 117 millones.
Además, la empresa Strabag, hasta entonces principal contratista del proyecto, se incorporó como socia minoritaria con cerca del 7% de la propiedad del consorcio.
Entonces, además, el grupo Luksic salió de la sociedad y modificó los contratos de suministro eléctrico vigentes.
El proyecto Alto Maipo considera una potencia de 531 MW, suministrando energía principalmente a Santiago. En enero de este año, Antofagasta Minerals, del grupo Luksic, decidió salir de la propiedad de esta iniciativa. Su alto costo de desarrollo hoy la deja en una posición débil a la hora de pelear por contratos de suministro de largo plazo.