Alza de rival obliga a Rousseff a acelerar su estrategia para contener a Aécio Neves

En las últimas semanas, los inversionistas han aplaudido cualquier señal que muestre un debilitamiento en los sondeos de la Presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y un avance de sus rivales. En primera vuelta lo fue con Marina Silva y ahora pasa con Aécio Neves de cara al balotaje. Prueba de ello es que ayer la Bolsa de Sao Paulo cerró con una fuerte alza de 4,78%, dado que el mercado veía una mayor probabilidad de que el candidato del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) supere a la abanderada del Partido de los Trabajadores (PT) este 26 de octubre.

El optimismo de los inversionistas se debe a que el fin de semana, Neves, el favorito de los mercados, logró finalmente el apoyo de Silva, la ex abanderada del Partido Socialista Brasileño (PSB), a lo que se sumó la publicación de un sondeo de Sensus, que lo ubicó casi 18 puntos porcentuales sobre Rousseff en intención de voto, contrastando con encuestas previas de Ibope y Datafolha, que los mostraban en empate técnico.

Y las malas noticias para Rousseff no se detuvieron ahí. Ayer, un estudio de Datafolha mostró que si las elecciones fueran hoy, el 6% de los brasileños que afirmaron haber votado por la mandataria en primera vuelta escogerían a Neves en el balotaje. En el caso del candidato del PSDB, la migración de votos hacia la petista sería de sólo 2%.

En este adverso escenario, ¿qué podría hacer entonces Rousseff? A juicio de Denis Rosenfield, cientista político de la Universidad Federal de Rio Grande do Sul, el PT, que "es muy eficaz en su trabajo de marketing político, va a intentar hacer un trabajo de deconstrucción de Aécio. Van a inventar cualquier cosa en su contra".

En esa línea, la propaganda televisiva del PT criticó ayer la gestión de Neves en el gobierno del estado de Minas Gerais, así como la del ex presidente del Banco Central Arminio Fraga, a quien el candidato escogió como eventual ministro de Hacienda. Asimismo, en la franja oficialista se destacan las "medidas impopulares" que dice que tomaría y se recalca que la deuda pública se dobló y la inflación creció en la gestión de Fraga al frente del Banco Central.

La franja de Neves, por su parte, abordó el problema de la alta inflación y la corrupción que afectan a Brasil. Según afirmó Rosenfield en entrevista con La Tercera, la estrategia de Neves "no cambiaría mucho" en relación a la primera vuelta.