Las números y el fanatismo han marcado la historia de Crepúsculo, la saga fílmica basada en las novelas de Stephenie Meyer que cerró su ciclo con el debut de Amanecer, parte 2. La cuarta entrega que llegó a salas chilenas el jueves, congregando a 42.309 espectadores, según la compañía medidora de audiencias Ultracine. Así, solamente en su primer día de exhibición, ésta superó a Los Vengadores, que llevó 33.297 espectadores, y a Batman: el caballero de la noche asciende, que tuvo 42.007, dos de las películas que ya habían marcado récords en nuestro país, a lo largo del año.
Una cifra que durante el fin de semana se elevó a los 166.812 asistentes, situando a la conclusión de Crepúsculo como uno de los estrenos más exitosos de 2012 en Chile y el mundo, donde el filme logró recaudar un total de US$ 340,9 millones, con su debut simultáneo en 61 países. Sólo en Estados Unidos, la cinta dirigida por Bill Condon arrasó en la taquilla, con US $ 141,3 millones, aunque esto no le permitió superar la marca de Luna nueva, que en 2009 debutó con $ 142,8 millones, como lo consigna The Hollywood Reporter.
Una serie de números que solo vienen a confirmar el fenómeno de la saga protagonizada por Kristen Stewart y Robert Pattinson, que es amparado por el fanatismo de su público mayoritario: las mujeres. Y esto no es coincidencia, ya que las novelas de Crepúsculo fueron escritas por una mujer, Stephenie Meyer, y se centran en una chica que se enamora de un vampiro, Bella Swan. Pero sus seguidoras no son sólo las jóvenes que se puedan identificar con Bella, ya que mujeres de distintas edades disfrutan de los filmes. "La gente cree que las fanáticas son las adolescentes y preadolescentes, pero no es solamente eso. De hecho, las mayores, chicas de más de 17 y sus madres, son las que más se nos acercan y nos dicen cosas. Creo que a muchas la historia les recuerda cómo era tener esta edad, 16 o 17, y estar enamorada por primera vez", comentó a BBC Mundo el propio Pattinson.
Por otro lado, se cuenta una historia de amor, lo que siempre es atrayente para el público femenino. Melissa Rosenberg, guionista de las películas, opina: "Hay algo muy universal sobre la relación y el viaje del personaje principal, Bella. Esa búsqueda de lo que ella ama y quién ella quiere ser, es algo con lo que me puedo identificar".
Sin embargo, es el elemento vampírico el que le da a Crepúsculo una de las principales claves del éxito. Anne Billson, crítica de The Guardian, afirma que los libros de Ann Rice son ejemplos de por qué estos seres son atractivos para las jóvenes: "Estas historias están narradas por una chica simple, que se considera poco especial" y que después, como Billson añade, "se encuentra con un vampiro que, en siglos, nunca había conocido una mujer tan seductora como ella".