La cadena de supermercados Whole Foods, de EE.UU., es conocida porque en sus 463 tiendas es posible encontrar productos exclusivos y orgánicos, pensados en un público preocupado por su alimentación. Pero también por su fama de cara, donde una palta orgánica puede costar 2,99 dólares (unos 1.900 pesos chilenos), fama que comenzó a terminarse ayer, gracias a su nuevo dueño: Amazon.
Ayer se concretó la compra de Whole Foods por parte de la compañía de Jeff Bezos, quien pagó US$ 13.700 millones -su mayor inversión hasta ahora- y además de llevar su Amazon Echo (dispositivo de comando de voz) a los pasillos del supermercado, hizo bajar sus precios hasta en 43%. Por lo mismo, ahora se puede comprar la misma palta a 1,49 dólares (poco menos de 1.000 pesos), según reportó CNN.
La medida ya había sido anunciada la semana pasada, al aprobarse la millonaria transacción. El director ejecutivo de Amazon Worldwide Consumer, Jeff Wilke, dijo, en un comunicado, que "todo el mundo debería ser capaz de comer la calidad de Whole Foods Market" y que bajarían los precios sin comprometer los altos estándares de la cadena.
A partir de ayer, además de la venta normal en estos locales, también se puede comprar a través de la web de Amazon, con retiro a casilleros de recogida en algunos puntos y la combinación con los programas Prime y Prime Now, servicios de entrega gratis y el mismo día, servicio similar al que ya opera en varios supermercados en Chile (ver recuadro).
El tema de los precios para Whole Foods ha sido incluso causa de problemas legales. En 2015, el Departamento de Asuntos del Consumidor de Nueva York acusó a la marca de "recargar sistemáticamente los alimentos preenvasados", como frutas y sándwiches, por lo que tuvo que pagar 500.000 dólares en multas.