Las dos Coreas alcanzaron un principio de acuerdo para reabrir el complejo industrial conjunto de Kaesong cerrado por la escalada de tensión militar en la zona, informó Seúl tras mantener negociaciones transfronterizas.

Funcionarios de ambas partes acordaron "reactivar las operaciones de las empresas" en el complejo industrial de Kaesong "cuando esté listo", según un acuerdo firmado por los dos bandos tras dos días de conversaciones maratonianas mantenidas cerca de la frontera entre el sábado y el domingo.

Ambas partes decidieron una nueva reunión el miércoles en Kaesong para estudiar los medios de evitar en el futuro otro cierre de las instalaciones y acordaron una inspección previa por empresarios surcoreanos. 

La reanudación de las negociaciones se produce después de dos meses de fuertes tensiones entre los dos países, y de amenazas por parte de Pyongyang, cuya economía se ha visto debilitada tras las sanciones decretadas por las Naciones Unidas debido a sus ensayos nucleares.

Pyongyang y Seúl afirmaban que querían reabrir esta zona industrial financiada por Corea del Sur y situada en territorio norcoreano, pero se culpaban mutuamente del cierre.

Problemas técnicos retrasaron el sábado el reinicio de las conversaciones, que se celebraron en el pueblo fronterizo de Panmunjom, debido a la reparación de líneas telefónicas para restablecer el enlace con el Sur. Ello retrasó dos horas el comienzo de las negociaciones.

Corea del Norte, invocando tensiones militares y la hostilidad del Sur, retiró en abril a sus 53.000 empleados de las 123 fábricas de este centro industrial, considerado un ejemplo de cooperación transfronteriza.

Pero ninguno de los dos países quiso asumir la responsabilidad de declarar el complejo de Kaesong oficialmente cerrado, y ambos se limitaron a reconocer que se trataba de un cierre temporal.

"Hemos aclarado varias veces nuestra posición para que Kaesong se desarrolle como un complejo según las normas internacionales, donde prevalezca el sentido común", declaró el portavoz del ministerio surcoreano de la  Unificación, Kim Hyung-Suk. "Espero que hallemos una solución en un clima común de confianza y cooperación", añadió.

La delegación del Sur reprochó al Norte haber decidido unilateralmente el cese de la actividad del complejo de Kaesong, y pidió garantías de que ello no vuelva a ocurrir, explicó a los periodistas un representante del ministerio de Unificación.

También precisó que Corea del Sur pediría al Norte que reconociera su responsabilidad en las pérdidas que habían sufrido las empresas surcoreanas debido al cierre del complejo.