Un total de 922 ambulancias hospitalarias, de transporte simple y para atender emergencias básicas y avanzadas, existen a lo largo del país. De éstas, sin embargo, sólo 433 están operativas, pues el 53% restante presenta fallas de diversa magnitud  o no está funcionando.

Así lo revela la información entregada por el Ministerio de Salud a La Tercera, y que detalla que de las 489 ambulancias que presentan desperfectos, el 32% se encuentra en estado "regular", es decir, han sufrido averías  que han imposibilitado su funcionamiento al menos dos veces en un año y el 21% restante está "malo" o "fuera de servicio".

Además, del total, son 230 vehículos (el 25%) los que están equipados con insumos y personal para atención de alta complejidad, mientras que el resto se divide en ambulancias de emergencias básicas y traslado simple (ver infografía).

La distribución de estos vehículos, en tanto, muestra que los servicios de la Región Metropolitana concentran el mayor parque, seguidos por el Maule, donde no se ha dado de baja ningún móvil, pese a la antigüedad. Al otro extremo están los servicios de Arica e Iquique (ver recuadro).

Así, la dotación de ambulancias operativas para asistir los 29 servicios de salud alcanza una tasa de  una por cada 41.108 habitantes, por debajo del estándar de un vehículo por 25 mil personas que recomienda la Organización Mundial de Salud (OMS).

El diagnóstico coincide con la denuncia de la Asociación de Reanimadores de Chile, quienes acusaron que la falta de estos móviles repercute en el tiempo de respuesta ante emergencias e incluso en la seguridad del personal que asiste a los pacientes al interior de las ambulancias.

"La gente reclama por las demoras en llegar, pero nos cuesta llegar no sólo por el déficit de ambulancias, sino porque muchas se usan en traslados de pacientes que necesitan un móvil avanzado, entonces hay que pedir apoyo", explicó el vocero de la asociación, Marco San Martín, quien agregó que "el día que hubo un bombazo en el barrio Yungay, donde una persona se estaba quemando, le correspondía asistir a una ambulancia de la Posta Central, pero las dos de turno andaban en traslado intrahospitalario y tuvieron que enviar una de Lo Prado".

INVERSIÓN

La subsecretaria de Redes Asistenciales, Angélica Verdugo, reconoce el problema y asegura que existe un plan, a corto y mediano plazo, de reposición y mejora. "Las ambulancias en el sector salud duran tres años y se inutilizan por la cantidad de kilometraje que usan diariamente. Son vehículos que están todo el día en la calle,  eso dificulta reponerlas y por eso hay muchas circulando en mal estado", dijo Verdugo.

Sergio Teke, coordinador del plan nacional de inversión en infraestructura del Minsal, añadió que para la renovación de este equipo hay tres fases: "La primera, para el año 2015, repondrá el 100% de las ambulancias que están fuera de servicio o en mal estado. Después, en 2016, pretendemos duplicar el parque de ambulancias, y en 2017, reponer el 100% de las ambulancias con más de tres años de antigüedad".

El plan de inversión va asociado a un estudio "para  tener un ponderador que relacione las características geográficas de cada región con las distancias que recorren esos vehículos. Si bien en Santiago hay una tremenda población, las distancias  son distintas a las de la zona norte, donde hay que ir a buscar pacientes a zonas aisladas y tienes ese vehículo destinado a esa función casi todo el día", agregó Teke.

El plan también incluye un incremento, en 2016, del personal que destina cada servicio de salud para la dotación de ambulancias de las unidades del Samu.