La impresionante venta electrónica de las entradas para el partido ante San Luis de Quillota, que el sábado a las 15.00 cerrará la participación de Universidad de Chile en el Clausura 2017, carece de precedentes desde que se implantó la distribución a través de internet: más de 30 mil boletos fueron adquiridos en sólo 90 minutos por los fanáticos azules.
Tal comportamiento fue sólo el reflejo del atractivo masivo que genera el cuadro azul, con prescindencia incluso de su ubicación en tabla, pues en este torneo llegó a caer hasta la duodécima posición, con sólo tres puntos y a seis de los líderes, Colo Colo y Deportes Iquique. Y sólo ahora, en la víspera de la última jornada, la escuadra que dirige Ángel Guilllermo Hoyos es único líder.
Pese a ese irregular rendimiento, que mejoró ostensiblemente en la segunda mitad del campeonato, los azules se alzaron como el cuadro que registra mayor asistencia promedio, con 32.222 espectadores, cifra que incluye una proyección del choque frente a los quillotanos, donde se espera un público superior a las 45 mil personas, mayor al mejor antecedente en este mismo campeonato, que fue de 43.278 personas, cuando los azules recibieron al Cacique.
Los 32.222 constituyen un hito en esta materia, puesto que se trata de la mayor asistencia promedio de los últimos 45 años, superada sólo por el Colo Colo campeón en 1972. Es una marca que deja atrás incluso el registro de los laicos de 1995, cuando alcanzaron el bicampeonato con Marcelo Salas como uno de sus símbolos.
[caption id="attachment_810454" align="aligncenter" width="1180"]
Foto: Ramón Monroy / Photosport[/caption]
También es importante consignar que hasta finales de la década de los 80, el Estadio Nacional era el coliseo donde se presentaban todos los equipos cuando disputaban partidos de alta convocatoria, pues el aforo del recinto ñuñoíno superaba los 77 mil espectadores. Actualmente, el principal estadio del país tiene una capacidad máxima de 48 mil. De este modo, la probabilidad de registrar mejores promedios era mucho más alta hasta que se redujo el número de aposentadurías.
La fidelidad de la hinchada estudiantil también ha sido significativa en campeonatos donde el rendimiento de la U ha sido bajo o derechamente mediocre. La prueba más cercana es el torneo pasado, cuando registró 30.041 espectadores, con los que encabezó los promedios de la temporada. Destacable, además, si se considera que el equipo terminó en séptimo lugar y estuvo en ubicaciones aún más desmejoradas durante buena parte del certamen, en el que fue dirigido por Sebastián Beccacece y por Víctor Hugo Castañeda, un período lleno de conflictos y decepciones para el club universitario.