Críticas ha recibido la denuncia que la diputada Karla Rubilar reveló sobre los 96 mil tarros de leche para niños que la subsecretaria de Salud Pública adquirió para la realización de un estudio que buscaba sustituir la tradicional leche Purita de los consultorios.

Quienes se sumaron a la crítica fue el partido Amplitud quienes calificaron como "escandalosa e irresponsable" la millonaria compra de los tarros de leche que implicó el desembolso de más de $422 millones.

Frente a esto, el vicepresidente del partido Amplitud aseveró que "nos parece escandaloso que en un Ministerio (de Salud) que tiene un gran número de pacientes en listas de espera y que tiene demoras eternas en el pago de las licencias médicas a beneficiaros de Fonasa, se hayan derrochado en forma tan irresponsable esta cantidad de recursos", afirmó el dirigente de Amplitud.

Mario Villalobos agregó que "creemos que la Subsecretaría de Salud Pública y el Ministerio de Salud le deben al país una explicación: ¿Cuál es la razón para un estudio que se requerían 9 mil tarros se adscribieron 96 mil?", se preguntó Villalobos.

Y es que el estudio que realizaría el INTA de la Universidad de Chile solo necesitaba 9 mil unidades, por lo que el resto de los tarros de leche fueron almacenadas en bodegas donde se vencieron, a todo esto se suma, además que el estudio nunca se realizó.

"Las autoridades de Salud deben dar es una explicación coherente, y esperamos que la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados cite al Subsecretario de Salud Pública a dar una explicación por este derroche de recursos públicos", dijo finalmente Villalobos.