Sigue la telenovela de Brett Anderson. El ex cantante de Suede que el viernes suspendió a última hora un concierto en el Teatro Caupolicán (tras una discusión que tuvo parte de su equipo de nueve personas con la gente de Inmigración en el aeropuerto de Lima, lo que no le permitió embarcarse a Santiago, según explicaron ellos mismos a los productores de Chile), sigue retenido en la capital peruana -en el hotel Miramar, ubicado en el barrio de Miraflores- y tendrá que ocupar la mañana del lunes para "conseguir los papeles que le permitan salir del país", según contó ayer el productor del concierto, José Antonio Aravena.

La misma fuente indica que el músico está consciente de lo complejo de la stituación y que tiene "toda la voluntad" de venir a tocar y saldar la deuda con sus seguidores. Pero  ha solicitado a la producción local que el recital se realice el martes y no el lunes como originalmente se pensó. "Dicen que van a llegar muy cansados y que quieren estar  preparados para hacer un gran conciertos", comenta Aravena, responsable del recinto donde se iba a hacer la presentación.

El último bochorno de Anderson se suma a la cancelación de lo que iba a ser su primer arribo en junio de 2008. Esa vez hubo problemas con los productores y el mismo músico denunció las irregularidades en su página web. Para el que iba a ser el recital de la revancha se habían vendido más de dos mil entradas.