El presidente del PS, el diputado Osvaldo Andrade, defendió que el equipo de la presidenta electa, Michelle Bachelet, haya reabierto el proceso de revisión de antecedentes de las autoridades nominadas para integrar su gobierno desde el 11 de marzo.
Esto luego de la fallida designación de Claudia Peirano, quien decidió no asumir en la subsecretaría de Educación tras los cuestionamientos a sus declaraciones en contra de la gratuidad universal y a su vinculación con Walter Oliva, ex dirigente DC sostenedor de establecimientos educacionales.
Al fallido nombramiento de Peirano se sumaron en los últimos días nuevos cuestionamientos a -entre otros- el designado subsecretario de Bienes Nacionales, Miguel Moreno, por un caso de ofensas al pudor, y al de Agricultura, Hugo Lara, frente a una querella por estafa en su contra.
Consultado si se pueden revisar las autoridades una vez que ya han sido nombradas, Andrade señaló que "todo se puede hacer. A mí me interesa que el gabinete que asume en marzo sea el mejor e incólume, desde el punto de vista de la apreciación ciudadana. Si es necesario ver, no veo cuál es el inconveniente".
"Lo que hemos tenido estos últimos días es revisar profusamente información de personas que estaban designadas, que todavía no han asumido formalmente su rol, pero que estaban designadas. No veo inconveniente y creo que eso ayuda a que los procesos sean lo más transparentes posibles", dijo.
Si bien Andrade dijo desconocer la metodología que está aplicando el equipo de Bachelet para revisar los antecedentes de las autoridades ya nominadas, aseveró que para el proceso que se abre, sobre la nominación de Seremis, gobernadores y jefes de servicio habrá mayor rigurosidad.
"Vamos a ser más rigurosos en las propuestas que hagamos en lo que continua, porque está claro que nuestro filtros fueron, en algunos casos, insuficientes, y no me cabe ninguna duda que la metodología que se instale debe ser más prolija en algunos casos", dijo.
De todas maneras, el timonel PS y vocero de la Nueva Mayoría desdramatizó la situación en el bloque.
"Estamos hablando de 70 nombramientos aproximadamente, lo que tenemos hasta ahora, se han suscitado dificultades en cuatro ó cinco, pueden haber más, pero convengamos que tampoco se trata de la mayoría, y en consecuencia, no creo que esto no tenga ni olor a crisis", aseveró.
Junto con esto, recalcó que "creo que la peor manera de enfrentar estas cosas es individualizar las responsabilidades".
"Creo que hay una primera fase en que las responsabilidad fundamental es de los partidos. Nosotros proponemos nombras, hacemos llegar nuestras sugerencias, ideas, y en consecuencia, hay un primer filtro que en estos casos no fue lo prolijo que tiene que ser y uno tiene que hacerse cargo de eso", insistió.
Respecto del rol que deberá asumir Bachelet frente a las cuestionadas nominaciones, el presidente del PS dijo que "ella enfrenta los problemas y no tengo ninguna duda, y no tengo ninguna duda que al término de sus vacaciones habrá que hacer lo que haya que hacer".
"Ojalá podamos tener resuelto si los partidos podemos colaborar en eso antes de la situación", expresó.