La historia sigue. A cinco meses de la denuncia que remeció al arbitraje chileno y que derivó en el despido de Mario Sánchez, ex integrante de la comisión de los jueces, y en la suspensión de cuatro árbitros activos, la ANFP volvió a golpear la mesa hace algunos días, al decidir la salida de Cristián Basso, uno de los réferis castigados tras el escándalo que se conoció en noviembre de 2012.
Basso, junto a los FIFA Marcelo Barraza y Roberto Tobar, más Carlos Rumiano, cumplían un castigo de ocho meses por su participación en el grupo liderado por Sánchez, la cual fue denunciada por un grupo de árbitros despedidos en 2012, versión que fue ratificada por el propio Basso, quien denunció que el "Club del Póquer" tenía injerencia en las designaciones de jueces para cada fin de semana.
La investigación encabezada por Oscar Fuentes, secretario ejecutivo de la ANFP, derivó en el cese de funciones de Sánchez y en el castigo de cuatro árbitros activos, entre los que destacan Barraza y Tobar, debido a que ambos estaban bien evaluados y habían sido designados para el último clásico universitario de la temporada anterior.
Por lo mismo, los cuatro sancionados debían seguir un régimen de entrenamientos, en los que muchas veces no estuvo presente Basso, quien, según sus cercanos, siempre creyó que su confesión pública terminaría por originar su salida del referato nacional.
En Quilín descartan este punto, al afirmar que el despido de Basso sólo responde a "necesidades de la empresa", mismo argumento que se esgrimió luego del cese de Cristián Ramírez, José Faúndez, Juan Donaire, Sergio Erices y Julio Díaz, quienes denunciaron la existencia del "Club del Póquer", en noviembre de 2012.
"Entiendo que es una decisión del empleador (ANFP), quien revisó el caso y adoptó la salida. A nosotros se nos informó igual que a él de la resolución", explicó Pablo Pozo, presidente de la comisión arbitral, quien evitó comentar si la decisión tiene relación con la denuncia hecha por Basso.
"Para nosotros es un tema cerrado. No tiene nada que ver una cosa con la otra. Son necesidades de la empresa, ya que tampoco hay una mala evaluación, pues Basso, durante mi mandato, ha estado suspendido", agregó el ex juez.
Por último, Pozo destacó que los otros árbitros sancionados continúan su preparación para volver a la actividad en el segundo semestre, tras cumplir en julio el castigo de ocho meses: "Los casos de Barraza, Rumiano y Tobar siguen tal cual. Siguen entrenando, a la espera de volver a dirigir".