Las gélidas temperaturas que desde hace una semana afectan al estado de Florida no sólo mantienen a sus residentes tiritando, sino también a las tortugas marinas, manatíes e iguanas, que en busca de calor arriesgan sus vidas en canales y lagunas.
Según representantes de la Comisión de Vida Salvaje de Florida (FWCC), los manatíes son particularmente vulnerables a las bajas temperaturas, ya que pudieran desarrollar "el Síndrome del Agua Fría", una condición que pudiera resultar fatal.
Cuando las temperaturas bajan, los manatíes usualmente se congregan en áreas cercanas a plantas de energía eléctrica, lagos y lagunas.
El canal de agua de la central hidroeléctrica de Tampa (noroeste de Florida) se ha convertido de esta forma en un refugio para todo tipo de animales que buscan las aguas más calientes.
En el canal de esa central hidroeléctrica se han refugiado iguanas, manatíes y otros animales que tradicionalmente sobreviven sin problemas las bajas temperaturas del invierno de Florida, que está sufriendo un período de frío inusualmente extenso.
Entre los animales más perjudicados se encuentran las iguanas, una especie que no es propiamente de Florida y que ha sido introducida en el estado por coleccionistas de animales y que se han reproducido rápidamente en los últimos años.
Cuando la temperatura baja de los cuatro grados centígrados, las iguanas quedan paralizadas y si se encuentran en las ramas de los árboles caen, quedando inmovilizadas hasta que sube la temperatura.
Debido al frío, que se pronostica continuará este fin de semana en Florida, donde se espera incluso nieve, los representantes de FWCC se mantienen alerta, especialmente en los lugares donde los manatíes se aglomeran, en la costa atlántica y en el área del Golfo de México, explicó Carli Selgelson, portavoz del FWCC.
En St. Petersburg, ecologistas salvaron el jueves a un manatí de las aguas de un canal con temperaturas de 11 grados centígrados, ya que estos mamíferos marinos no soportan por largo período temperaturas de menos de 20 grados centígrados.
Y en el condado Brevard, en noroeste del estado, donde se han sentido temperaturas bajo cero grados centígrados, los ecologistas de FWCC rescataron esta semana más de 250 tortugas marinas que se encontraban "paralizadas del frío", en la Laguna Mosquito.
Aunque los manatíes y las tortugas son los más vulnerables a las bajas temperaturas, el frío también ha afectado a decenas de peces, según la FWCC.
"La línea caliente del FWCC ha recibido varios reportes relacionados con peces muertos, debido al frío", sostuvo Selgelson.
Asimismo, las autoridades han pedido al público no molestar ni alimentar estas especies para estimularlos a moverse en busca de alimentos.
También, solicitan limitar el uso de botes alrededor de las aguas donde estos animales gustan pasar el invierno debido a que el exceso de actividad y ruidos pudiera espantarlos y obligarlos a buscar refugio en lugares fríos.