El año de Cristiano Ronaldo, otra vez dominador del mundo

No es algo nuevo para él. A sus 31 años, Cristiano Ronaldo ya ha recibido cuatro Balones de Oro. El de 2016, a diferencia del resto, fue un año en el que su poder goleador no fue tanto como el de temporadas anteriores, pero al ser pieza clave en los títulos de sus clubes marcó la diferencia.

41 goles en liga, siete en Champions League, siete por Eliminatorias Europeas y tres en la Eurocopa fueron parte de su repertorio. Y eso que en España, durante este inicio de temporada, ha recibido varias críticas por estar más alejado del arco rival. Lleva 10 goles en la actual liga, muy poco para la exigente afición del Bernabéu y para lo que tenía acostumbrada al resto.

De todas formas, los dos títulos que ganó este año tienen un valor especial. El primero fue en mayo, en la Champions League. Cristiano Ronaldo no tuvo una buena actuación en la final, pero fue capaz de anotar el penal definitivo para ganarle la definición a Real Madrid. Y en las rondas anteriores, como contra Wolfsburgo en cuartos de final, sacó a relucir su poder goleador. Los vikingos habían perdido por 2-0 en la ida, pero él remontó la serie con un hat-trick en la revancha.

Tras levantar una nueva Liga de Campeones, la tercera de su carrera, CR7 llegó a la Eurocopa rodeado de problemas físicos y a cargo de un plantel que prácticamente dependía de él. De hecho, Portugal solamente sumó tres puntos en la primera ronda, en la que Cristiano le marcó un doblete a Hungría. Uno de esos tantos fue uno de los mejores de la Copa al anotar con un elegante taquito.

Tras avanzar de ronda, Portugal superó a Croacia en el alargue, a Polonia en penales y a Gales en una semifinal en la que CR7 anotó. En la final, solamente alcanzó a jugar 25 minutos ante Francia, aunque en la final ocupó un rol protagónico alentando al resto de sus compañeros y evidenciándose como líder del grupo.

Portugal, con CR7 de capitán, obtuvo su máximo título de la historia. Que Cristiano Ronaldo haya liderado ese grupo le dio un plus para ganar, nuevamente, un Balón de Oro. Siempre será discutido. Pero las estadísticas sacan a relucir que es de los mejores.