Entre enero de 2013 y enero de 2012, el número de trabajadores dependientes creció en torno a 144 mil, debido básicamente al fuerte aumento del empleo formal, esto es, con contrato de trabajo, destaca un estudio realizado por el Ministerio de Desarrollo Social.

El análisis agrega que el número de trabajadores dependientes con contrato subió en 220 mil en dicho periodo, mientras que los sin contrato cayeron en 76 mil. De este modo, el porcentaje de trabajadores dependientes protegidos por un contrato de trabajo subió de 81,9% en enero de 2012, a 83,7 en enero de 2013 (correspondiente a 5.862.220 personas).

En marzo de 2010, el porcentaje de los trabajadores dependientes con contrato se ubicaba en 80,2%.

Por regiones, en Antofagasta, Atacama y Magallanes se observan los porcentajes más altos de empleo con contrato, superando el 90%. Más atrás se ubican Aysén (con 89,7%) y Tarapacá (con 88,2%).

Entre las regiones rezagadas en el indicador están Maule (72,8%), Los Ríos (78,1%) y La Araucanía (79,1%). "En estas regiones, una mayor proporción de trabajadores se dedica a la agricultura, actividad típicamente informal", indica el informe, mientras que en zonas del norte del país la actividad predominante es la minería, que presenta contratos más estables y formales.

SUPERAR LA POBREZA
Según explicó el ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, "la formalidad laboral fortalece la capacidad negociadora del trabajador y, por lo tanto, son mejores las condiciones en que se encuentra para exigir mayores beneficios a su empleador".

Agregó que "dejar la condición de pobreza es un proceso de mediano plazo, por lo que es clave la formalidad y contar con un contrato estable, ya que eso permite contar con otros beneficios, como acceso a crédito".

La investigadora del Instituto Libertad y Desarrollo Cecilia Cifuentes aseveró que estas cifras ratifican que los empleos que se han creado no sólo "son cantidad, sino que también de calidad". Añadió que si bien existen otros aspectos que se deben considerar para evaluar la calidad de un empleo, el hecho de "tener un contrato de trabajo es un indicador importante, porque la posibilidad de que cuenten con previsión social es bastante alta y ese es un indicador objetivo para medir la calidad laboral".

El académico de la Universidad de Chile Joseph Ramos apuntó que la cifra no sólo es positiva por el nivel de trabajadores con contrato, sino que también porque "está siendo generada por empresas que están contratando personas y no por empleos por cuenta propia".

MAYOR FLEXIBILIDAD
Pese a las buenas cifras, aún existen diferencias entre hombres y mujeres. En enero, los hombres con contrato de trabajo llegaron a 85,3% del total, mientras que en las mujeres la participación fue de 81,3%. Para avanzar en este aspecto, Cifuentes recomendó que se debe avanzar en flexibilizar el mercado laboral y, de esta manera, integrar más a las mujeres a la fuerza de trabajo. "Por condiciones naturales, las mujeres necesitan mayor flexibilidad laboral, lo que no significa precarizar el trabajo", dijo.