Todos felices. O'Higgins y Antofagasta igualaron 2-2 en Rancagua y ambos elencos cumplieron sus objetivos. Los nortinos zafaron del descenso y los rancagüinos accedieron a la liguilla de postemporada.
El partido, eso sí, no estuvo exento de nerviosismo. La mutua obligación de los objetivos en juego hizo que el desarrollo del partido estuviera marcado, casi íntegramente, por el nerviosismo. De esa forma, las imprecisiones se volvieron constantes y el trámite del compormiso se caracterizó por la fricción y los errores, sobre todo de la mitad de la cancha hacia adelante.
El equipo local, eso sí, se puso rápidamente en ventaja. Recién se jugaban 11 minutos cuando Sebastián Pinto anotó de cabeza luego de un remate al palo de Braulio Leal. Mientras, el 1-1 fue obra de Gerson Martínez, quien aprovechó una desinteligencia de la zaga celeste que permitió que el ariete recibiera sin marca dentro del área.
En el segundo tiempo, los nortinos manejaron de mejor manera la pelota y a los 58' encontraron premio gracias a una volea de Rodrigo Riquelme, quien sacó provecho de un mal despeje de Albert Acevedo. No obstante, la alegría antofagastina duró poco ya que Leal anotaría de cabeza el empate 2-2 a los 61 minutos, tras buen centro de Yerson Opazo.
Los minutos finales fueron más tensos aún. La atención de los fanáticos del cuadro nortino se centró en Chillán. Con el triunfo de Ñublense, un gol de O'Higgins los condenaba a jugar la próxima temporada en Primera B. Sin embargo, los dirigidos de José Cantillana tuvieron la posesión en los minutos finales, mantuvieron el resultado y lograron sacar la tarea adelante.
O'Higgins, por su parte, consciente de que el resultado también les era favorable, tampoco apuró su ritmo sobre los minutos finales. Ahora, mientras los nortinos piensan en cómo subir el bajo nivel exhibido durante este torneo de cara a la próxima temporada, los celestes de la Sexta Región tendrán, en la liguilla, la chance de mejorar un irregular semestre y coronarlo con el pase a la Copa Sudamericana.