Un gran descontento viven habitantes de la provincia de Concepción, ante la decisión de no extender los planes de empleos de emergencia coordinados con el Cuerpo Militar del Trabajo en las zonas más afectadas por el terremoto y maremoto de febrero pasado.

Por lo que para la próxima semana se anuncia la "marcha del hambre" con la que alcaldes, concejales, parlamentarios y trabajadores de la zona esperan trasladarse desde Concepción hasta La Moneda para exigir la prolongación de los planes de empleo.

Esto surge ya que ayer jueves se puso fin a los contratos de los últimos trabajadores que se habían acogido a este programa de empleos de emergencia, que tenía dos grandes objetivos: servir de apoyo económico para las familias y avanzar en las labores de limpieza en las regiones afectadas.

El subsecretario del Trabajo, Bruno Baranda, aseveró ayer que "el programa era acotado y lo fuimos alargando en algunos zonas con problemas profundos de cesantía. Sin embargo, la fecha de término era conocida y prevista".

TERREMOTO
Habitantes de las comunas costeras de Tomé, Talcahuano, Coronel y Lota son los más afectados por esta situación por lo que algunos alcaldes ya han salido a las calles para exigir la extensión de los planes de empleo.

Es así como Jorge Venegas, alcalde de Lota, desestimó la capacidad del mercado de absorber esta mano de obra como apuntaron autoridades de gobierno.

"¿Dónde están las fábricas, dónde están las industrias, dónde están las empresas? No están por ningún lado. Así es que lo que espero es que estos programas continúen en el tiempo. Si me demuestra el subsecretario que en Lota y en la Región del Biobío los empresarios, el Estado, ha hecho las inversiones necesarias para crear empleo, ahí aceptaría que estos programas puedan ir disminuyendo en el tiempo. Pero hoy día eso es pura demagogia", señaló Venegas a radio Cooperativa.

A este programa coordinado con el Cuerpo Militar del Trabajo, postularon mayoritariamente mujeres jefas de hogar que se quedaron con el 70% de estos cupos de trabajo.

"Después del terremoto y posterior tsunami, como que le tiró (Sebastián Piñera) un salvavidas a la gente y ahora él mismo se los desinfla. Todavía hay trabajo por hacer", indicó a Cooperativa María Angélica Cid, vocera de los trabajadores de Tomé, quien pidió que el Presidente Piñera no les dé la espalda.