Britney Spears de nuevo divide al mundo. O se le ama o se le odia.

Ayer, la cantante apareció en la ceremonia de los premios Grammy junto a su novio, Jason Trawick, y un traje negro que generó los más diversos comentarios en los medios especializados. Por ejemplo, el portal Celebridades24.es aseguró que la cantante se veía estilizada, con su mejor figura en muchos años, como una suerte de reflejo de su resurrección artística.

"Junto con su novio Jason Trawick, la cantante mostraba una sonrisa de oreja a oreja, mientras saludaba a los paparazzi en vestido negro de encajes el cual dejaban ver su, ahora estilizado, cuerpo. Lo complementó con unos tacones de color negro. La señorita Spears ha estado experimentando un regreso importante en su carrera desde el año pasado, gracias a un álbum de platino en venta, así como un lleno total de su gira mundial", comentó el sitio.

En contraparte, el sitio US Magazine calificó de "extraño" y "desproporcionado" su traje, recalcando que no se veía del todo bien.