El Presidente de Yemen, Ali Abdullah Saleh se recupera en un hospital de Arabia Saudita de las graves heridas que sufrió durante un ataque al palacio presidencial en junio pasado. Si bien en principio se habló de una situación delicada ya que el mandatario tenía incrustado un trozo de proyectil en el pecho, además de heridas en su cabeza, no han surgido mayores detalles de su recuperación, salvó lo argumentado hoy por el  ministro de Relaciones Exteriores saudita, Saud al Faisal.

En escuetas declaraciones dijo que la salud de Saleh, es "en general buena". Al Faisal, quien realizó estas declaraciones durante una conferencia de prensa conjunta en Riad con el ministro de Relaciones Exteriores británico William Hague, no brindó mayores precisiones.

Hague, por su parte, manifestó el respaldo de su país para "alcanzar una solución política que conduzca a un futuro seguro y estable para el pueblo yemení".

Miles de yemeníes reclaman desde febrero que Saleh renuncie tras 32 años en el poder. Más de 350 personas murieron en la represión gubernamental contra los manifestantes, aseguran grupos defensores de los derechos humanos.

En tanto, hoy se informó de la muerte de al menos 40 supuestos miembros de Al Qaeda en varios ataques aéreos y en choques con el Ejército yemení en la ciudad de Zinjibar, controlada por la organización terrorista desde el pasado 27 de mayo.