Noruega se convirtió el miércoles en el primer país del mundo en terminar con las radios AM y FM y reemplazarlas por la denominada Radio Digital Terrestre (RDT). Esta tecnología permitirá mejorar la calidad del sonido, aumentar el número de frecuencias y a un costo mucho menor en el largo plazo.

Noruega, que empezó con esta transición el 11 de enero, realizó este "apagón" por etapas: primero en las principales ciudades y radioemisoras del país y luego en las radios más pequeñas y regionales.

En Chile, si bien la intención es seguir este mismo camino, aún es lejano. Eduardo Martínez, presidente de Archi (Asociación de Radiodifusores de Chile), estima que la tecnología debería estar operativa en 2026. Antes, dice, hay que definir la norma que se usará. "En los próximos ocho a 10 años ya tendremos transmisión digital, después de definir y saber cuál va a ser el sistema operativo y ver cuáles son los costos y cómo se asumen. Estamos a la espera de la norma y que las marcas salgan a competir", dice.

Respecto a la norma, señala que el ente regulador todavía no toma una decisión entre los dos imperantes en el mundo, la americana y la europea. "El año 2000 se vieron indicios de avances, pero luego vino un proceso de tranquilidad que hemos mantenido hasta hoy, esperando experiencias de otros países", sostiene.

Considera que la radio AM será la gran ganadora, "ya que transmitirá con una calidad mucho mejor de la que escuchamos hoy. Ambas van a mejorar, y tendrán la calidad de un CD. La AM hoy transmite en mono con una calidad muy baja, por lo que la diferencia se va a notar". De hecho, dice, el concepto de AM o FM se acabará con la radio digital.

Pedro Huichalaf, ex subsecretario de Telecomunicaciones, compara este proceso con lo que vive la televisión digital en el país. "En la Televisión Digital, el tema pasó por el Congreso y se demoró cinco años en discutir la ley. Luego, a mí me tocó hacer el reglamento técnico, es decir, cómo las empresas pasaban de formato analógico a digital. Se estableció como límite el año 2020 para el apagón analógico definitivo".

Dice, sin embargo, que en el caso de la televisión el proceso fue más fácil, porque hoy casi el 90% de los televisores vienen con el decodificador incorporado. "Hoy mucha gente tiene el dispositivo y no lo usa".

Pero dice que no visualiza un plan de trabajo en el corto plazo. "No hay una política para avanzar a la digitalización radial. Es el camino que deberíamos seguir. El primer estudio que debe hacer el Gobierno es determinar qué tipo de norma adoptará, porque eso determina que equipos se traen".

Señala que se trata de un sistema que trae múltiples beneficios. Por ejemplo, que las señales pueden estar más cerca, lo que las hace más eficientes.

César Azurdia, académico del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la U. de Chile, coincide en que la calidad es uno de los grandes beneficios de la radios digitales, junto con el consumo de potencia en las antenas, que es menor con el que actualmente se trabaja (menor consumo) y la optimización del espectro radioeléctrico. "El servicio será el mismo, sólo que de mejor calidad".

Si advierte que al principio habrá un costo económico importante, ya que se necesitarán nuevos receptores, "pero es un cambio positivo".

Azurdia indica que muchos países hoy viven con un sistema híbrido. "Chile, comparado con Noruega o EE.UU. va algo atrás, incluso con algunos de Latinoamérica, que ya definieron su estándar".

Prevé que el país demorará 10 años en entrar a la era de la radio digital. "Noruega es el primero en apagar las radios tradicionales de manera definitiva. Los demás tienen un sistema híbrido".

Dice que si se apaga de golpe, habrá mucha gente que se quedará sin acceso, porque los equipos son costosos, por eso sugiere hacerlo por etapas, como Noruega.