La Archidiócesis de México pidió hoy "respeto" para el papa Benedicto XVI en la visita que este mes realizará al país, y demandó que se le permita decir lo que quiere "hacia nuestra realidad política y social" durante su viaje.

"En realidad no hay temas ajenos a las preocupaciones de la Iglesia en medio de la sociedad, y por eso no hay temas que no pueda tocar el Papa en su mensaje religioso y social", señaló el semanario Desde la Fe en su editorial de hoy.

El mensaje de la archidiósesis más importante del país, estuvo dedicado hoy a la primera visita del papa Ratzinger a México, prevista del 23 al 26 de marzo y que se desarrollará en el estado de Guanajuato, centro del país.

El editorial refiere que "hay ambientes de la sociedad mexicana que son contrarios a las expresiones de fe y por lo mismo son contrarios a lo que pudiera decir Benedicto XVI".

A la visita se refirió hoy en rueda de prensa el arzobispo de León, José Guadalupe Martín Rábago, quien pidió ayuda a cualquier persona, incluidos los no católicos, para formar las vallas humanas que acoten los recorridos por donde pasará el vehículo de Benedicto XVI.

La Constitución mexicana establece expresamente en su artículo 130 apartado E que ningún representante religioso puede en reuniones públicas o actos de culto "oponerse a las leyes del país o a sus instituciones, ni agraviar de cualquier forma los símbolos patrios".

Dicho artículo que ahorra a las autoridades mexicanas buena parte de las críticas eclesiásticas se interpreta a partir del "principio histórico de la separación del Estado y las iglesias" en este país, de tradición laica desde la Guerra de Reforma (1857-1861) que encumbró a Benito Juárez en la Presidencia.