El grupo británico Arctic Monkeys hizo entrar en calor anoche con su música acelerada y contundente a las 35.000 personas que componían el público de la tercera edición del festival MTV Winter, cuyo escenario ha sido la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valenci.
Con una temperatura inusual en la ciudad, que rondaba los 5 grados, la banda liderada por Alex Turner ofreció casi una hora y media de música frenética que puso a saltar y bailar a un público joven, en el que predominaban los adolescentes.
Pese a que este año el festival invernal de la MTV esperaba aumentar el número de asistentes por celebrarse en fin de semana, lo cierto es que la tercera edición no conseguió superar las 38.000 personas que el año pasado bailaron al ritmo de la música de Franz Ferdinand.
Alex Turner, acompañado por Matt Helders (batería), Jamie Cook (guitarra) y Nick O'Maley (bajo), ofrecieron un recital compuesto por casi una veintena de canciones y que comenzó al ritmo de Dance little liar, uno de los temas de su último trabajo, Humbug.
De este disco, el tercero de la formación de Sheffield, han rescatado canciones como Crying lightning, Potion approaching o My propeller, que suponen un sonido diferente al de sus dos primeros trabajos, y al que el público parece no haberse habituado todavía.
De hecho, los temas más celebrados formaban parte de Whatever people say I am, that's what I'm not y Favourite worst nightmare, los dos trabajos discográficos que han hecho de Arctic Monkeys un éxito sin precedentes, y que les han colocado en los primeros puestos de las listas de ventas del mundo.
Brainstorm, The view from the afternoon, I bet you look good on the dancefloor o When the sun goes down hacieron saltar al público gracias a su frenético ritmo, marcado por las guitarras agresivas de Turner y Cook y la poderosa batería de Helders.
Entre canción y canción, Turner no dejó de tantear al público, no sin dificultad, con expresiones en castellano como "Valencia, ¿cómo estás?" y se ha mostrado muy cercano a las 38.000 personas que pasaban frío en el estanque de la Ciudad de las Artes.
Y tras una cálida despedida con la canción Secret door, los "monos árticos" volvieron al escenario para los "bises", la balada Fluorescent adolescent, muy acorde con la edad del público, y 505, dos temas que han puesto punto y final a un concierto que ha dejado exhaustos a los aficionados.
Tras su paso por Valencia, los Arctic Monkeys tocarán en el Royal Albert Hall de Londres en la que está siendo, hasta ahora, su gira más larga por Europa, y que en España ya los llevó a Madrid y a Barcelona, donde actuaron el 5 y el 6 de febrero, respectivamente.
El festival reunió también a los británicos Mystery Jets, los estadounidenses Lightspeed Champion y los valencianos Fuzzy White Casters que han sido los encargados, muy puntuales, de dar comienzo a las actuaciones a las 20 horas, cuando la lluvia todavía amenazaba con estropear el evento.
La cadena de televisión MTV ha grabado los conciertos en alta definición, para retransmitirlos a nivel nacional e internacional, con cámaras Red One, una tecnología innovadora que acerca la grabación a la imagen cinematográfica y que ha sido utilizada por primera vez en Valencia en un evento de esta magnitud.