Hace dos años, Arelis Uribe (Santiago, 1987) viajó a la Araucanía. Como periodista, su trabajo era observar el aprendizaje de estudiantes en liceos públicos de la región. Allí conoció a Lionel, un joven de 17 años que había aprendido a nadar solo y que amaba el deporte, pero que en busca de mejores oportunidades prefirió estudiar contabilidad y alistarse en el Ejército. "Yo miraba a Lionel y no sabía qué contestarle. ¿Por qué el Ejército?, pensaba sin decirlo [...]. ¿Por qué nadie te ha conducido a ser un Tomás González, una Kristel Köbrich? ¿Dónde está la educación pública que debería guiar a cada adolescente de Chile a descubrir sus talentos y cumplir sus sueños?", narra la autora en la columna La historia de Lionel, que publicó online en 2016 y en la que explica el origen del cuento Lionel, con el que ganó la XV versión del concurso Santiago en 100 Palabras.
La historia de Lionel es una de las 20 columnas que componen su nuevo libro, Que explote todo. Educación, desigualdad y feminismo, son los principales temas que aborda en este ejemplar, recopilación de su trabajo como columnista de opinión en distintos medios online, entre 2014 y 2016.
Uribe publicó a fines del año pasado su primer libro, Quiltras, una compilación de cuentos protagonizados por mujeres. "La gente me conoció primero por Quiltras, pero lo que yo hice antes fue escribir columnas de opinión", explica. "Las mismas ideas que están insinuadas en los cuentos, acá son explícitas. Por eso yo siento que son libros hermanos".
¿Cómo escogió las columnas?
Empecé revisando mis primeras publicaciones y me di cuenta de que habían cambiado mucho mis opiniones y mi voz. Eso fue perturbador, aún me estoy reconciliando con la idea de no estar de acuerdo conmigo misma. Luego de la revisión hice una selección de los temas que más me interesan y de columnas que abordan cosas que todavía me preocupan.
¿Por qué empezó a escribirlas?
Porque trabajaba en una agencia de marketing y sentía que no estaba haciendo nada bueno por el mundo. Era todo tan vacío que el único espacio que vi como trinchera fueron las columnas. La primera que publiqué fue sobre la incomodidad de ser de izquierda y tener que promover el capitalismo.
La autora cuenta que escribir y publicar columnas se convirtió, desde entonces, en un hábito: "Sentía la urgencia de decir muchas cosas".
La desenvoltura crítica de Uribe molestó a más de alguno. Primero se enfrascó en una polémica con el vocalista de la banda Ases Falsos, Cristóbal Briceño, luego de que el cantante dijera que el feminismo era "una burrada". Luego, Rafael Gumucio se refirió a los escritores jóvenes en una entrevista con La Tercera y habló de "una escritora que dice que todos los días la tratan de violar y tocar. Bueno, yo la conozco y no es pa' tanto".
¿Qué impresión le causaron los dichos de Gumucio?
No hay nada más machista que rebatirle un argumento a una mujer aludiendo a su aspecto físico. Además, es errado pensar que la violación está asociada al gusto. O sea que si eres bonita, ¿se entiende que te abusen? ¿Te lo mereces? Me parece que está súper mal su enfoque.
Uribe ya no publica columnas de opinión: "Me di cuenta de que lo que escribo en verdad la gente lo lee, entonces ahora lo pienso más".
¿Volvió a saber de Lionel?
No, y prefiero no saber. Me daría vergüenza decirle que escribí su historia y que después me gané un premio. Aún no sé qué hacer con la contradicción de ganar privilegios por denunciar injusticias.
Que explote todo fue lanzado ayer y ya está en librerías. En tanto, la autora trabaja en un nuevo volumen sobre periodismo y feminismo, que será publicado por Planeta.