Anoche, el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, se comunicó con el jefe de la bancada de diputados de la DC, Matías Walker, para aclarar el contexto de las declaraciones con las que, a primera hora, había enfrentado los reparos al acuerdo alcanzado con la oposición por la reforma tributaria y que habían sido interpretadas como una dura crítica a los diputados falangistas.
"Se trata de armar una teleserie en cómo se hizo este protocolo de acuerdo y hay algunos extras que quieren ser protagonistas", había afirmado Arenas en radio Cooperativa, al ser consultado por un supuesto encuentro en la casa del ex ministro de Economía Juan Andrés Fontaine y las críticas de sectores de la Nueva Mayoría.
Sus palabras fueron calificadas de "irrespetuosas e inaceptables", en una dura declaración pública elaborada horas más tarde por la bancada DC.
El diputado Jaime Pilowsky había agregado que los dichos del ministro, "reflejan un menosprecio al trabajo parlamentario", mientras que Gabriel Silber afirmó: "Preferimos ser extras a que cocinen a millones de chilenos a espaldas de la democracia".
La polémica logró desactivarse luego de que Arenas hablara con Walker y, paralelamente, el ministerio aclarara públicamente que el titular de la cartera "jamás aludió a los diputados ni a la Nueva Mayoría", que su frase fue "descontextualizada" y que "estaba referida a las distintas versiones surgidas sobre cómo se gestó el protocolo y a quienes participaron en el proceso".
En un comunicado, el diputado Walker dijo que Arenas le señaló que sus dichos no se referían a los diputados de la Nueva Mayoría, sino al "protagonismo de Fontaine".
"Damos, por lo tanto, por superado este impasse", agregó el diputado de la DC, tras el contacto con el ministro.