Los tenedores de bonos de Argentina se ven amenazados ante la perspectiva de que el país reniegue de sus obligaciones en menos de dos meses luego de que los acreedores "holdout" -los que no aceptaron la reestructuración de la deuda tras el impago de 2001 del país-, rechazaran una propuesta de pago.

Los rendimientos de los bonos reestructurados en dólares con vencimiento en 2017 y 2033, el pago de cuyos intereses vence en junio, aumentaron ayer 0,3 puntos porcentuales. Los rendimientos promedio de la deuda gubernamental argentina treparon 0,06 puntos porcentuales.

Los dos bonos tuvieron un mal desempeño como consecuencia de que se especula que una corte de los Estados Unidos ordenará a Argentina pagar a los tenedores de deuda impaga antes de hacer pagos de US$387 millones en junio a los tenedores de deuda con vencimiento en 2017 y 2033.

El rechazo de la propuesta, que los acreedores sostienen que sería menos del 15 por ciento de los US$1.470 millones que afirman que se les debe, detuvo el aumento de los bonos argentinos de este mes, que fue el mayor entre los mercados emergentes.

En una audiencia judicial del 27 de febrero, Argentina dijo que no obedecerá un fallo que le ordenó pagar el total de lo adeudado a los "holdouts", entre ellos Elliott Management Corp., del multimillonario Paul Singer, y ofreció en su lugar condiciones similares a las de sus reestructuraciones de deuda de 2005 y 2010.

"Dada la posición hostil de Argentina respecto de las cortes y la comunidad internacional, es improbable que obtengan más concesiones", dijo Jorge Piedrahita, máximo responsable ejecutivo de la firma de operaciones Torino Capital LLC de Nueva York. "Eso pone en riesgo los pagos de junio, de modo que esos bonos y todos los papeles de Nueva York tendrán un mal desempeño".

Fallo definitivo

La respuesta del 19 de abril de los tenedores de bonos impagos ante la propuesta argentina, que llegó tres días antes de que expirara el plazo, allana el camino para la decisión de una corte de apelaciones sobre el caso que presentó NML Capital Ltd., de Elliott Management, en 2008. Argentina declaró en 2001 un impago de un récord de US$95.000 millones de deuda.

Si la corte ratifica un fallo del 22 de noviembre que ordenaba a Argentina pagar a los "holdouts" el total de lo adeudado al mismo tiempo que paga a los inversores de su deuda reestructurada, y el país sudamericano se niega a acatar la decisión, podrían correr peligro los pagos de bonos de US$42 millones del 2 de junio y de US$345 millones del 30 de junio.


Argentina podría obtener un nuevo aplazamiento de la decisión o la corte podría solicitar información adicional antes de tomar una decisión.

"Los tiempos son bastante impredecibles", dijo Casey Reckman, un economista de Credit Suisse Group AG, en entrevista telefónica desde Nueva York. "No descartamos que la corte pueda tomar una decisión antes de los pagos de los bonos, pero también es posible que pida más información y pueda tardar más".