El gobierno argentino ordenó este martes a las distribuidoras de electricidad Edesur y Edenor pagar 158 millones de pesos argentinos (US$33 millones) por un gigantesco apagón que la semana pasada afectó a millones de personas en Buenos Aires.

El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) informó que la sanción, que comprende multas y resarcimientos a usuarios, será de 129 millones de pesos argentinos para Edesur y de 29 millones de pesos argentinos para Edenor.

"Los fundamentos de la medida se refieren a la demora en la restitución del servicio", destacó el ente gubernamental en un comunicado de prensa.

El apagón tuvo lugar el miércoles pasado durante un horario peak de demanda por una inusual ola de calor y dejó a decenas de miles de viviendas sin electricidad en Buenos Aires y sus alrededores.

Ni el gobierno ni las distribuidoras de electricidad informaron sobre las causas del corte, aunque el ministro de Infraestructura, Julio de Vido, denunció un posible sabotaje.

El corte de energía hizo colapsar el tránsito, ya que muchos semáforos dejaron de funcionar y varias líneas de tren y metro suspendieron su servicio en el horario de mayor actividad en la tarde.

Edenor, propiedad de Pampa Energía y Edesur, controlada indirectamente por la italiana Enel, son las dos principales distribuidoras de energía del país.

Las dos empresas atraviesan dificultades financieras que algunos expertos atribuyen a los límites impuestos por el gobierno para el alza de tarifas.

Expertos han dicho que la red de distribución eléctrica en la capital argentina está al borde del colapso por la falta de inversión.

Pocos días antes del corte, el gobierno había dicho que no preveía problemas con el suministro eléctrico durante el próximo verano austral.