Argentina canceló hoy títulos públicos por US$2.197 millones correspondientes al último tramo de los denominados Boden 2012, bonos emitidos durante la crisis de 2001 para compensar a los afectados por las restricciones bancarias.
Los Boden 2012 fueron emitidos en julio de 2002, en plena crisis financiera, para ser entregados a los clientes bancarios cuyos depósitos quedaron atrapados en el denominado "corralito".
"Terminamos de pagar el corralito. Sin deuda, somos más libres", dijo el Ministerio de Economía en su página web, cuando el contador digital que desde hace días llevaba la cuenta regresiva, hasta en segundos, para el pago de los Boden 2012 llegó a cero.
En total se han emitido US$19.600 millones de estos títulos que se fueron cancelando en cuotas desde 2005 y la última fue la que venció hoy.
Según fuentes oficiales, el 78 % de los acreedores que cobraron hoy está fuera de Argentina, principalmente fondos de inversión de Estados Unidos, Luxemburgo, Italia, Francia y Dinamarca.
El pago de hoy fue inscrito por el gobierno de Cristina Fernández como el cierre de un "ciclo histórico" de fuerte endeudamiento de Argentina que culminó con la crisis financiera de 2001.
"Con el pago de la última cuota de los Boden 2012, que se concretó hoy, se cumple la política de desendeudamiento llevada adelante por Argentina durante los últimos ocho años", dijo el Gobierno argentino a través de su sitio de internet.
Fernández señaló este jueves que esta política de desendeudamiento garantiza al país "independencia" en el marco de la crisis global.
De acuerdo a datos oficiales, la deuda pública Argentina en manos de privados emitida en moneda extranjera pasó del 92 % del PIB en 2002 al 8,4 % tras la cancelación hoy de los Boden 2012.