El acuerdo preliminar entre Argentina y el grupo español Repsol por la expropiación de la petrolera YPF abrirá las puertas a las inversiones extranjeras que necesita la nación para desarrollar sus enormes recursos de hidrocarburos no convencionales, dijo este martes el gobierno trasandino.
Argentina informó el lunes que llegó a un acuerdo con Repsol para compensar a la firma española por la nacionalización de su 51% de participación en YPF el año pasado. El país no reveló el monto de la indemnización, pero aclaró que incluirá activos líquidos.
La expropiación de YPF había despertado críticas entre los inversionistas internacionales y puesto en duda la perspectiva de desarrollo de Vaca Muerta, una formación patagónica que podría contener una de las mayores reservas de crudo y gas natural no convencional del planeta.
Además, las demandas que interpuso Repsol en cortes extranjeras por la nacionalización, habían bloqueado las posibilidades de YPF de financiarse en el exterior y cerrar acuerdos con petroleras internacionales para atraer inversiones a Vaca Muerta.
"Para nosotros (el acuerdo) constituye un sendero que nos va a permitir seguir generando mecanismos de inversión para exploración y explotación hidrocarburífera, que en Argentina tiene un programa muy ambicioso en los próximos años", dijo el jefe de Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich.
El desarrollo de Vaca Muerta demandaría unos US$250.000 millones, según estimaciones privadas.
Pero la inversión extranjera directa se mantiene alejada de Argentina debido al intervencionismo del gobierno de la presidenta peronista, Cristina Fernández, y a un complicado panorama económico por la alta inflación, un tipo de cambio sobrevaluado y un control de cambios que impide girar dividendos al exterior.
Fernández justificó la expropiación de YPF, porque supuestamente Repsol no invirtió lo suficiente en la compañía para evitar el declive de su producción y reservas, lo que llevó al país a convertirse en un importador neto de hidrocarburos y castigó su clave superávit comercial.
YPF es la principal operadora en Vaca Muerta, donde también tienen presencia las estadounidenses Chevron, Apache y Exxon Mobil, la canadiense Americas Petrogas, la francesa Total, Royal Dutch Shell, la brasileña Petrobras, la argentina Tecpetrol y Pan American Energy -controlada por la británica BP -, entre otras empresas.