El Papa Francisco pidió hoy por el "eterno descanso" de los nueve bomberos fallecidos este miércoles cuando intentaban sofocar el incendio de un almacén al sur de Buenos Aires y se solidarizó con sus familiares, compañeros y amigos, mientras sus cuerpos son velados en distintos puntos de la capital argentina.
"Quisiera transmitir a todos mi cercanía y decirles que me siento muy unido a los que sufren y están abatidos por tan lamentable suceso", dijo Francisco a través de una misiva difundida hoy por la Agencia Informativa Católica Argentina.
El Pontífice se manifestó "profundamente apenado" por la tragedia y agregó que pide a Dios "que otorgue consuelo y fortaleza a los afectados por tan trágica desgracia e inspire a todos sentimientos de solidaridad fraterna, que ayuden a afrontar esta adversidad de la mejor forma posible".
El Gobierno argentino declaró dos días de duelo nacional por el fallecimiento de siete bomberos y dos miembros de los equipos de rescate ayer, durante la extinción de un incendio en un almacén situado en el barrio de Barracas de la capital argentina.
Las muertes se produjeron cuando se desplomó una de las paredes del edificio sobre los equipos de emergencia que iniciaban las tareas para sofocar el fuego.
Según una lista difundida por el diario Clarín, los fallecidos son el comisario inspector Leonardo Day, la subinspectora Anahí Garnica -de 27 años, madre de una niña y miembro de la primera promoción de mujeres en la Superintendencia de Bomberos-, los cabos primero Eduardo Adrián Canessa y Damián Béliz, los agentes Maximiliano Martínez y Juan Matías Monticelli, Sebastián Campos, el bombero voluntario de Vuelta de Rocha y los rescatistas Pedro Baricolo y José Méndez, integrantes de Defensa Civil de la Ciudad de Buenos Aires.