El gobierno argentino rechazó hoy "enérgicamente las lamentables declaraciones" del ministro de Defensa británico Liam Fox, quien declaró este lunes que el Reino Unido está decidido a mantener la soberanía sobre las islas Malvinas, y que los políticos argentinos pueden "cansarse todo lo que quieran" luchando por ellas.

"Tenemos ya (aviones de combate) Typhoons estacionados en la zona y enviamos un mensaje muy claro de que tenemos el poder naval si fuera necesario y el compromiso de garantizar que las Malvinas se mantendrán libres y su pueblo disfrutará de la liberación por la que luchamos tan duro hace 30 años", añadió.

El comunicado de la Cancillería argentina asegura que "el Reino Unido continúa demostrando su desprecio por el derecho internacional al desoír los reiterados llamados de la comunidad internacional a sentarse a negociar con la Argentina para resolver la disputa de soberanía".

Según la Cancillería argentina, "las declaraciones del ministro británico ponen de manifiesto una vez más la actitud militarista del Reino Unido en el Atlántico Sur, que contrasta con la vocación por una resolución pacífica del conflicto consistentemente sostenida por la Argentina".

El gobierno argentino reiteró en ese sentido su compromiso para "buscar una solución pacífica de la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes".

Las declaraciones se producen diez días después de que el primer ministro, David Cameron, provocara una fuerte reacción de la presidenta Cristina Fernández al decir ante el Parlamento que la soberanía de las islas, disputadas por ambas naciones en la guerra de 1982, no era negociable. La mandataria argentina describió a Cameron como "arrogante y estúpido" y a Reino Unido como una potencia colonial en declive.