El Presidente costarricense, Oscar Arias, entregó hoy a las delegaciones enfrentadas del Mandatario constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, y los representantes del régimen de facto que gobierna ese país, la llamada "Declaración de San José".

En esta nueva y última propuesta, Arias instó a conformar un "Gobierno de unidad y reconciliación nacional".

"Solicitamos al Congreso Nacional que... retrotraiga la situación del poder ejecutivo, poder legislativo, poder judicial y Tribunal Supremo Electoral a su estado previo al 28 de junio... lo anterior implica el retorno de José Manuel Zelaya a la Presidencia", señaló el documento de cinco páginas entregado por el Presidente costarricense, copias del cual fueron distribuidas a la prensa.

Entre los puntos del acuerdo, se establece una fecha exacta para el retorno de Zelaya al país, que sería, de aceptar las partes, el próximo viernes. Además, se estipula el adelanto de las elecciones hondureñas para el próximo 28 de octubre y una amnistía para delitos políticos.

Otra clausula de relevancia dice que reiteran el respeto a la Constitución y las leyes del país, absteniéndose de hacer llamamientos a la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente, de modo directo o indirecto, y renunciando también a promover o apoyar cualquier consulta popular con el fin de reformar la Constitución para permitir la reelección presidencial, modificar la forma de gobierno o contravenir cualquiera de los artículos  irreformables de nuestra Carta Fundamental.

Además, se insta al Tribunal Supremo Electoral a que autorice y acredite la presencia de misiones internacionales desde ahora y hasta la declaratoria del resultado de las elecciones generales, así como durante el traspaso de poderes que tendrá lugar, conforme con el artículo 237 de la Constitución de la República de Honduras, el 27 de enero de 2010.

El documento pide la creación de una Comisión de Verificación de los compromisos asumidos en este Acuerdo, y los que de él se  deriven, presidida por la Organización de Estados Americanos (OEA), y las personas que ésta considere idóneas entre las figuras nacionales e internacionales.

De la misma manera, incluye un compromiso a no iniciar ni continuar acciones legales por los actos anteriores al 1 de julio de 2009 que se deriven del presente conflicto, por un periodo de seis meses.

"La victoria será a medias para ambos o no será para ninguno", "revisen este documento y reflexionen sobre él. No es perfecto, en la democracia nada es perfecto. Es el primer documento en la historia de la humanidad para dar marchar atrás a un golpe de estado", dijo Arias antes de comenzar a leer el acuerdo.

Arias adelantó que con esto finaliza su papel como mediador y que será decisión de las partes si aceptan o no la nueva iniciativa, similar a la que lanzó el fin de semana anterior y que fue rechazada por la comisión del gobierno de facto liderado por Roberto Micheletti.

Por su parte, la delegación que representa al depuesto Presidente, afirmó que para ellos "el diálogo ha fracasado", a pesar de la presentación de una nueva propuesta de acuerdo.

Paralelamente, el representante del Presidente de facto Micheletti, Mauricio Villeda dijo que hoy mismo presentará el Acuerdo de San José a los "tres poderes de Estado" en su país, para su estudio.