La Armada israelí interceptó hoy y tomó el control de un barco que transportaba a activistas palestinos y ayuda a la Franja de Gaza, desafiando el bloqueo del Estado judío, y llevó el navío a un puerto en Israel, dijo una portavoz militar.

"No hubo disparos durante el abordaje al barco", indicó el Ejército israelí a través de un comunicado. Una fuente policial agregó que es probable que la tripulación del bote y los activistas sean deportados.

El pequeño ferry había partido desde Chipre con activistas del Movimiento Gaza Libre, con sede en Estados Unidos, y ayuda humanitaria para palestinos en la Franja de Gaza, territorio gobernado por el grupo islámico Hamas.

El Ejército informó que el navío fue interceptado en aguas cercanas a la costa de la Franja de Gaza, que son controladas por Israel. Luego fue llevado al puerto israelí de Ashdod en donde atracó.

El Movimiento Gaza Libre dijo que la ganadora del Nobel de la Paz, Mairead Maguire, y la ex congresista estadounidense, Cynthia McKinney, también iban a bordo del barco.

En dos ocasiones anteriores, el Ejército israelí interceptó a activistas del Movimiento Gaza Libre, que navegaban hacia el enclave costero.

"Ayer en la tarde la Marina israelí contactó al bote mientras navegaba, dejando en claro que no se le permitiría entrar a aguas costeras de Gaza debido a riesgos de seguridad en el área y al existente bloqueo naval", comentó el Ejército.

"Ignorando todas las advertencias, el bote de carga entró en aguas costeras de Gaza", agregó el comunicado.

Greta Berlin, representante del Movimiento Gaza Libre en Chipre, expresó su indignación ante lo que calificó como el robo del bote y el secuestro de sus pasajeros por parte de Israel.

En tanto, Grecia, cuya bandera ondeaba en el navío confiscado, exigió a las autoridades israelíes la inmediata liberación del bote, la tripulación y sus pasajeros.

Israel estrechó el bloqueo sobre la Franja de Gaza en el 2007, después que el grupo Hamas tomó el control del enclave donde viven cerca de 1,5 millones de personas.

La ofensiva israelí de 22 días sobre el enclave en diciembre y enero, que según el Estado judío buscaba terminar con el lanzamiento de cohetes hacia su territorio, profundizó una crisis humanitaria.

Sin embargo, Mark Regev, portavoz del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, comentó que"Israel permite todos los días que el apoyo humanitario llegue a la gente de Gaza. Comida, medicinas, energía y así sucesivamente".

"Este bote no se relacionaba con eso, este bote se trataba de activistas políticos que han sido apologistas del régimen de Hamas", agregó.