Con la presencia del comandante en Jefe de la Armada, almirante Edmundo González, se desarrolló este miércoles la ceremonia de ascenso de los oficiales generales que conformarán el Alto Mando Naval 2010.
La ceremonia contó con la asistencia de los ex comandantes en Jefe de la Armada, senador Jorge Arancibia y almirante Rodolfo Codina, junto con el obispo general castrense, Juan Pablo Barros, además de todos los miembros del Alto Mando actual y sus esposas, familiares de los oficiales ascendidos e invitados especiales.
En la ocasión, ascendieron al grado de vicealmirante los contraalmirantes Federico Niemann y Enrique Larrañaga, en tanto que a contraalmirante ascendieron los comodoros Matías Purcell y Ricardo Böke; junto con los capitanes de navío Gastón Massa, Giancarlo Stagno, Gabriel Barros, Cristián Davanzo y Marco Amigo.
Asimismo, a los contraalmirantes Federico Niemann y Enrique Larrañaga les fueron impuesta las condecoraciones "Orden al Mérito Naval" en el grado de "Comendador" y "Cruz de la Victoria".
Tras la lectura de los decretos que nombra a los nuevos oficiales generales, el almirante Edmundo González les formuló todas las expectativas que tiene de sus trabajos, aclarando que "concretado en su parte medular el proceso de renovación del material, deben ser las dotaciones activas y pasivas y sus familias el patrimonio más preciado a preservar, proteger y motivar. En ello espero estén vertidos sus esfuerzos".
Además, explicó que les pedirá "equilibrio en las exigencias, justicia en el actuar, dedicación y lealtad en la relación sus superiores y subordinados y sobriedad en la conducta de vida". Finalmente agregó que deberán tener también "la más absoluta tranquilidad de que en la adversidad, no van a estar solos, quien les habla será el más fiel custodio de vuestros intereses, velando en todas circunstancias por sus más preciados anhelos".