La Guardia di Finanza, policía financiera italiana, arrestó hoy a 47 personas, entre ellas 16 jueces tributarios, otros funcionarios y miembros del clan Fabbrocino de la Camorra, la mafia napolitana, bajo la acusación de asociación criminal.
Según un comunicado de la Policía financiera, la red operaba con empresarios especializados en la compraventa inmobiliaria y hotelera, y funcionarios que trabajan en el sector tributario que gestionaban actividades ilegales en las localidades de Nola y en el área vesuviana.
Tras la operación que reaizó entre la región de Campania, en el sur, y Lombardía, en el norte, 22 personas fueron encarceladas, 25 puestas bajo arresto domiciliario y a 13 se les comunicó la orden de no abandonar la provincia de Nápoles.
Asimismo, se confiscaron bienes por un valor de 1.000 millones de euros, entre cuentas corrientes, acciones, actividades financieras, terrenos, edificios y vehículos.
Además de la asociación mafiosa, los detenidos están acusados de lavado de dinero procedente de actividades ilegales y corrupción en actos judiciales, entre otros.
Según las investigaciones, la organización había construido una red de facturaciones falsas para el lavado de dinero que después llegaba a bancos de Bélgica, Liechtenstein, Luxemburgo y Suiza.
Si la Policía financiera lograba descubrir que se habían realizado falsas facturas y evasión fiscal, los empresarios impugnaban las multas y los jueces fallaban a su favor.