"Ninguna frase, ninguna coma, ningún texto, ningún autor, ningún delito, ningún rencor, ninguna, ninguna canción de amor". Estos versos del poeta nacional Juan Luis Martínez inspiraron una de las obras que protagonizan la muestra Quien como Dios, que el pintor y fotógrafo chileno Carlos Bogni (1957) exhibe hasta el 1 de septiembre en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC) del Parque Forestal.
Los estilos son diversos: óleos en gran formato, collages fotográficos e impresiones digitales -realizados desde 1984 hasta la fecha- dan vida a una exhibición que resume 30 años de trayectoria del artista. ¿El factor común? Las palabras. "Yo escribo desde niño y siempre participé en talleres literarios. Mi obra tiene mucho que ver con la ilustración de textos, siempre aparece una frase. Eso es básico. Para mí, todo es literatura", afirma.
Aunque muchas de estas frases son de su autoría, Bogni dice que nunca pensó en dedicarse a la escritura. "Si bien es una disciplina que me ayuda a pensar, lo mío se completa con la visualidad y con el humor que imprimen las imágenes. Al unir estas dos técnicas nace algo que no existe, principio básico del collage".
En el último tiempo, Bogni ha trabajado en una serie de obras que citan mitos del budismo, el islam y la religión cristiana. De hecho, el fotomontaje que le da nombre a la muestra está inspirado en el paraíso de los musulmanes: un espacio habitado exclusivamente por huríes, mujeres que -según el Corán- tienen el don de la eterna juventud. "Empecé a trabajar en torno a ello mientras vivía en Nueva York, donde conocí la religión musulmana. Se dice que si mueres según la yihad, 75 doncellas vírgenes te acompañarán en el cielo durante mil años", cuenta.
Para retratar esta especie de jardín del edén, Bogni mezcló imágenes de mujeres desnudas -de revistas porno- con fotos de playas, montañas, tormentas y volcanes en erupción. Al centro, desde una roca, San Juan eleva su mirada al sol, donde aparece estampada la frase "Quien como Dios". "Yo hago una sátira, pero de forma velada. Desgraciadamente, al citar a Mahoma uno es perseguido, incluso en Chile".
Además de sus obras recientes, Bogni exhibe piezas anteriores que ha mantenido en constante reelaboración. A juicio de Roberto Merino, autor del catálogo de la exposición, estamos ante un artista "que ejecuta a través de los años la misma obra en numerosas variaciones". Y Bogni coincide: "Desde los 80 estoy desarrollando los mismos temas, siempre estoy corrigiendo lo que hago, puliéndolo. Esta muestra es la mejor lograda. Me encantó el montaje, todo es muy pulcro. Lo que más me gusta es que las obras parecen narraciones. Como son modulares, las historias se arman solas, siempre surge algo coherente desde donde el espectador comience a leer. Y sigue siendo un collage", finaliza.