A cuatro cuadras del centro de Talagante, en un barrio de viviendas construidas hace casi 40 años, una pequeña plaza sombreada con tupidos árboles, a pesar del paso de los meses otoñales, se emplaza como el principal hito de ese lado del pueblo. Ahí, dos calles de cierta relevancia para los lugareños se cruzan formando una intersección bastante transitada.
"En un cruce importante, porque los colectivos que vienen del centro aquí doblan a la izquierda y toman el camino hacia Peñaflor", cuenta Alfredo Quiroz (48), vecino y dueño de un almacén en el barrio.
Sin embargo, aquellas dos vías -Esmeralda, que va de poniente a oriente, y Arturo Prat, que va desde norte a sur- tienen otra particularidad, que incluso los propios habitantes de Talagante desconocen: según un análisis realizado por Mapcity, esas dos denominaciones vinculadas al Combate Naval de Iquique son los nombres de calles más utilizados en Chile, encabezando un ranking donde abundan los personajes históricos y los árboles autóctonos (ver listado).
"Acá no tenemos mar, pero existe una tradición con el tema de las Glorias Navales. Hay un colegio que se llama Arturo Prat y también está la calle 21 de Mayo", recalca el alcalde de la ciudad Raúl Leiva. "Muchas comunas nombran las calles por un sentido de arraigo, la denominación de Esmeralda y Arturo Prat en esta comuna viene desde los años 50", agrega.
Manuel Rodríguez, la poetisa Gabriela Mistral, Lautaro y Caupolicán también destacan en el ranking. Según explican en Mapcity, el análisis englobó a avenidas, calles y pasajes y se realizó sobre una base de 150 mil denominaciones en todo el país. "Tenemos una cobertura en ciudades mayores de 50 mil habitantes y en otras localidades", detalla Nelson Betancourt, jefe de cartografías y estudios de la empresa.
Que personajes de relevancia estén entre los nombres más comunes no es novedad para el profesor de historia de la U. Diego Portales, Gabriel Cid. "El nombre de una calle es algo simbólico y hace referencia a hitos simbólicos del país. Arturo Prat no va estar en la periferia y mientras más al centro estén las calles, más significativas son", explica.
Según Cid, antes de la Guerra del Pacífico el hecho principal para nombrar vías era la Independencia y, en menor medida, la guerra contra la Confederación Perú-Boliviana. "Del primer caso aparecen calles como Independencia, Constitución o República. Después de esa guerra, son comunes nombres como Yungay o Bulnes", dice.
Sin embargo, Cid destaca que luego hubo un boom de nombres vinculados a Arturo Prat. "Un diario peruano después de la guerra hablaba de que existía una pratmanía. Almacenes, calles, se llamaban así, e incluso el Congreso pensó, en 1884, bautizar como Prat a la provincia de Tarapacá", añade.
Sobre la abundancia de nombres vinculados a plantas, el alcalde Maipú y presidente de la Asociación de Municipalidades de Chile, Christian Vittori, comenta que se debe a que se busca simplificar el trámite. "Cuando son villas nuevas, la Dirección de Obras hace un trabajo para asignar nombres de calles. Para hacer el trámite más fácil, se recurre a ciertos tópicos, como nombres de árboles o efemérides", detalla. "Los más recurrentes son los tópicos de árboles o flores, pero también están los poetas o incluso el sistema solar", añade.
Luego de ocurrir esto, las municipalidades pueden realizar un proceso para cambiar los nombres, tanto de las nuevas villas como las calles antiguas (ver recuadro). "El concejo municipal, con quórum simple, puede cambiar el nombre de una calle, luego de consultar al Consejo de la Sociedad Civil, aunque esa consulta no es vinculante. Modificar el nombre de un conjunto habitacional requiere un quórum mayor", explica el edil de Talagante.
En regiones la tónica de nombres vinculados a héroes y plantas se mantiene, aunque cambian el orden. En Valparaíso, Arturo Prat sigue siendo el más común, pero en la Región de Coquimbo y la Metropolitana encabeza la lista Gabriela Mistral. En el Biobío la calle más popular es Los Alerces, aunque en este caso, entre las más comunes aparece el nombre del ex Presidente Pedro Aguirre Cerda.
Según Cid, con el Centenario de la Independencia viene otra horneada de nombres que se hacen populares, como Huemul y Copihue. Es en esta época cuando se comienzan a usar dos de los nombres más comunes del listado: Caupolicán y Lautaro.
"Se utilizan nombres de indígenas, pero lo curioso es que están relacionados con la conquista de Chile, pero no con los actuales", dice. A futuro, el historiador plantea que la ausencia de guerras o otros hitos simbólicos puede que varíe el abanico de nombres para bautizar nuevas calles. "En Buin empezamos con la calle Mauricio Isla o en Tocopilla con la calle Alexis Sánchez. Es posible que exista una que se llame Felipe Camiroaga o Los 33 mineros. De alguna manera se debe renovar el panteón de figuras ilustres", comenta.