Hace exactamente un mes comenzaron los sondeos de Blanco y Negro con Arturo Salah, para que el ex entrenador ingresara al directorio de la concesionaria alba. No obstante, "hace 10 días comenzamos las negociaciones formales con él", ratifica Aníbal Mosa, accionista mayoritario de ByN.

Y es que en un principio Salah se mostró reacio a trabajar en el "Cacique". Sobre todo cuando supo sobre la renuncia de Leonidas Vial (ayer no estuvo presente en la junta para no exponerse ante los accionistas), quien tenía tomada la decisión de irse de la compañía. Por ello, la primera exigencia del ex DT de Universidad de Chile para aceptar el cargo fue pedir la continuidad del fundador de LarrainVial en la mesa directiva. Se conocían a través de Manuel Pellegrini, quien es muy amigo de ambos. De esta forma el empresario desistió de abandonar la institución, lo que le entregó la tranquilidad suficiente a Salah para seguir negociando su ingreso al directorio.

Luego, Salah pidió tener injerencia directa en la elección del nuevo entrenador del "Cacique". Tanto así, que una alta fuente alba asegura que "la opinión de Arturo será decisiva para elegir al nuevo entrenador. Si bien le va a pedir antecedentes a Juan Gutiérrez sobre los técnicos con los que se juntó, él decidirá el nombre final, el que debe ser aprobado por el resto del directorio".

Así, pese a que en la concesionaria aseguran que en las próximas reuniones de directorio se escuchará la opinión de todos los directores, el nuevo mandamás tendrá mucho poder para elegir al reemplazante de Omar Labruna.

"Salah va a tener mayor potestad en el directorio y eso se reflejará con un rayado de cancha. Podrá contratar y despedir", ratifica Mosa, recalcando que "queríamos dar un golpe de timón con un hombre fuerte, ya que siempre se nos critica que los directores no tenemos idea de fútbol. OK, no sabemos de fútbol, pero ahora estará a cargo del club una persona que lleva 40 años de experiencia en este deporte y nosotros, los accionistas, nos encargaremos de otras cosas".

Además, Salah "pidió estabilidad tanto en el directorio como en el nuevo entrenador que asuma. No quiere seguir con la constante rotación de técnicos, situación que nosotros también queremos terminar", aporta Mosa, agregando que "si bien el primer tiempo del mandato de Salah estará relacionado directamente con el primer equipo, también pidió darle relevancia a las divisiones inferiores del club".

Así, la mesa directiva de ByN fue convenciéndose de que el nombre de Salah era el indicado para reemplazar a Carlos Tapia, y por ello no tuvieron mayores reparos en aceptar las condiciones que propuso el ingeniero civil de la Universidad Católica.

El ex subsecretario de Deportes, quien tendrá un contrato indefinido y ganará $ 15 millones mensuales, le aseguró a la mesa de ByN que será "un presidente 24/7", por lo que solicitó tener una oficina en el estadio Monumental. Sin embargo, le recomendaron que la tuviera en otro lado, para no estar tan expuesto con los hinchas. Salah lo está pensando.

El directorio no tuvo inconveniente en aceptar todas las exigencias de Salah. Es más, Aníbal Mosa dejó atrás su intención de ser presidente de la institución por dejar en ese cargo al ex director técnico.

"Bajé mi candidatura para que asumiera Arturo. Hubo consenso absoluto del directorio para su llegada, así que estamos seguros de que desde hoy comenzará un nuevo Colo Colo", cierra un ilusionado Mosa.