El arzobispo de Concepción, Fernando Chomalí, hizo un llamado a los católicos a reaccionar frente a la situación de pobreza en las aldeas creadas tras el terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010 y este lunes invitó a la comunidad a participar de la campaña de invierno que se va a extender durante todo julio.
"La Iglesia Católica no puede quedar al margen del sufrimiento de tantas personas. He quedado impactado de ver las aldeas, las condiciones en las cuales viven y, por supuesto, queremos aportar con una campaña que va dirigida a los católicos, pero también a todos los hombres de buena voluntad con alimentos no perecibles, de tal forma de que estas personas puedan alimentarse lo mejor posible", dijo el sacerdote.
Además, el arzobispo penquista aseguró que este "es un signo de justicia hacia personas que lo han perdido todo… todo el fruto de su trabajo por el terremoto".
Además, relató que tras un recorrido por las aldeas de emergencia de la región del Biobío "quedé impactado de ver cómo hay personas que viven en situación de humedad, de vulnerabilidad, de mucha pobreza y creo que nosotros no tenemos que apagar la llama de la esperanza (…) no se apaga siendo solidarios".
Finalmente, Fernando Chomalí sostuvo que la comunidad no pueda hacer como si esta realidad no existiera, ya que "la razón de ser de la iglesia es servir".