El viceasesor de seguridad de Estados Unidos Tony Blinken se disculpó porque el intercambio del soldado estadounidense Bowe Bergdahl por líderes talibanes detenidos en Guantánamo se realizó sin consultar al Congreso, informaron los medios.
Blinken llamó a la senadora y presidenta del Comité de Servicios Secretos, Dianne Feinstein, para pedir disculpas, indicó la revista online The Hill. "Se disculpó y dijo que fue un error", dijo Feinstein.
Bergdahl, de 28 años, fue puesto en libertad el fin de semana en virtud de un controvertido intercambio por cinco talibanes presos en la cárcel de Guantánamo.
Críticos se quejaron de que el Congreso sólo fue informado después de haberse llevado a cabo el intercambio. Una ley estadounidense establece que los comités correspondientes deben ser informados con al menos 30 días de anticipación sobre un traslado de prisioneros.
Líderes políticos de ambas cámaras estaban casi de forma unánime en contra de un intercambio en el caso Bergdahl, dijo Feinstein.
La Casa Blanca acordó "desde hace tiempo" con el Congreso sobre la necesidad de un intercambio, dijo por su parte el presidente Barack Obama, desde Varsovia, la primera escala de su gira por Europa. Había preocupación por la salud de Bergdahl y se aprovechó la oportunidad, añadió.
Entretanto, el jefe del Estado Mayor, Martin Dempsey, indicó que el soldado podría ser sometido a una investigación sobre su desaparición.
Los compañeros de Bergdahl, que estuvo preso cinco años en Afganistán, sospechan que podría haber desertado de su puesto antes de caer en manos de los talibanes.
"Nuestro Ejército no mira para otro lado en caso de comportamiento incorrecto, si es que lo hubo", dijo hoy en Facebook el jefe del Estado Mayor, Martin Dempsey. Por el momento, como para cada estadounidense, se asume para Bergdahl la presunción de inocencia hasta que se demuestre lo contrario.
"Respecto a las circunstancias de su captura, conoceremos los hechos cuando esté en situación de transmitirlos", explicó el jefe del Estado Mayor.
"Probablemente era la última oportunidad de liberarle", afirmó Dempsey. Por ahora Bergdahl está siendo sometido a exámenes médicos y psicológicos en el Hospital Militar de la base estadounidense de Landstuhl, en Alemania.