La Asociacion de Exportadores de Manufacturas (Asexma) dio a conocer hoy el balance de las exportaciones de manufacturas 2010, año en que se evidenció un alza de 11,6% en los envíos, completando un total de US$7.999 millones.
La cifra fue calificada como positiva por el presidente del gremio exportador manufacturero, Roberto Fantuzzi, sin embargo, dijo que "pese al crecimiento que experimentan los envíos, aún continuamos por debajo de los niveles de 2008".
Fantuzzi recalcó que "este año superamos la proyección inicial de US$7.200 millones, pero las cifras pudieron ser mayores sin la inestabilidad de mercados como EEUU y Europa. Eso sí, hay que agregar que hubo una mayor demanda, especiamente, en el bloque Mercosur".
Para 2011, la asociación gremial espera que las exportaciones de manufacturas alcancen los US$8.550 millones, lo que sería equivalente a un incremento de 6,9%.
Frente a las proyecciones para el año en curso, Fantuzi dijo que los envíos tienden a estabilizarse: "se observa una tendencia a la mantención de las exportaciones debido a la inestabilidad económica mundial, lo que hace un panorama menos auspicioso que el año anterior".
Dólar e Intervención
De acuerdo a un sondeo realizado por Asexma, un 52,2% de las compañías que participan en el sector exportador piensan que la intervención del Banco Central fue insuficiente o neutra. En tanto, un 47,5% de los encuestados afirmó que la decisión del ente emisor fue suficiente, mientras tanto que un 64,1% la estimó tardía.
Asimismo, el 50% de los entrevistados afirma que en 2011 el dólar fluctuará entre los $480 y $500. Sin embargo, el 32,5% prevé que la moneda norteamericana estará por encima de los $500. Mientras que un 15% cree que la divisa se moverá por los $460 y los $480.
Respecto de la intervención anunciada la semana pasada por el Banco Central, Fantuzzi la celebró, pero dijo que "fue un poco tardía, y al ser tardía tiene sus costos".
Frente a los efectos de la medida, el dirigente gremial cree que "el dólar llegará a cierto nivel y después va a bajar como si cayera en paracaídas, lentamente, que es lo ideal y ahí tenemos que ser lo suficientemente inteligentes como país de aumentar la productividad para compensar.