Dentro de las franquicias infantiles, La era de hielo es una institución en sí misma: su público es fiel y corre a las salas de cine cada vez que hay un nuevo estreno de las aventuras del perezoso Sid y las zarigüeyas Crash y Eddie. Como ejemplo, con 2.071.937 de espectadores, la cuarta película de la saga es la segunda más vista en el país.
Por tanto, no es nada extraño que llegue a Chile el espectáculo La era de hielo live!, un show que tendrá funciones hoy, mañana y el domingo en Movistar Arena y mostrará cómo estos personajes siguen buscando lugares con mejores pastizales. Un montaje que se extiende durante dos horas.
La Tour manager del evento, la israelí Lechay Bekerman, es la encargada de que cada detalle del show salga a la perfección y que cada una de las 70 personas del equipo -entre patinadores, acróbatas aéreos y coreógrafos, vestuaristas y quienes montan el escenario-, cumplan con sus respectivas tareas, fuera o dentro de la pista de hielo. Ella cuenta que para hacer el traslado del escenario, vestuario e iluminación que se ve durante el show, son necesarios nueve camiones. "Demoramos dos o tres días en armar la pista de hielo y sobre eso se construye el resto del escenario: las luces, pantallas y todo lo que se necesita". Como el Movistar Arena estuvo ocupado el martes pasado con el concierto de Kiss, los plazos se acortaron y debieron partir todo el proceso pasada la una de la madrugada del miércoles. "En Chile, estamos haciendo una magia especial para el hielo", dice Bekerman de buen humor y agrega: "Estamos trabajando cada minuto para conseguir que todo esté a tiempo".
Por su parte, William Todd Jones tiene el rol de maestro titiritero y es el encargado de enseñarle a los artistas caracterizados con disfraces a moverse con naturalidad y del mismo modo en que lo hacen los personajes de la cinta. "Yo los entreno, porque deben mantenerse en los límites de lo que hacen los personajes, porque el público espera ver lo que ya conoce de las cintas", explica.
La patinadora francesa Charlene Hamelet ha sido parte de este espectáculo desde su inicio "Siempre es lindo, porque hay muchos niños en el público y siempre están muy felices de ver todo. Se emocionan con cada cosa que ocurre. La mejor parte del show es ver sonreír a los niños".
Aunque el show está girando por el mundo desde su debut en Londres en 2012 y se hacen varias presentaciones por semana, las 40 personas del equipo no dejan de perfeccionarse. Es por eso que viajan junto a una coreógrafa que supervisa todo el show, por lo que tendrán un ensayo esta mañana, antes del debut en el país.