En total, son 647 fiscales adjuntos a lo largo del país, a cargo de más de un millón 300 mil causas, que ingresan al Ministerio Público cada año. De este universo, desde la implementación de la Reforma Procesal Penal, en 2000, han presentado sus renuncias 160 persecutores, lo que da una tasa de 12 fiscales que anualmente dejan su cargo, según los datos que entrega la Asociación de Fiscales. Un fenómeno que genera inquietud en el Ministerio Público.

La falta de carrera, el exceso de trabajo, y desmotivación, son parte de las razones que esgrimen algunos fiscales, que decidieron dejar el Ministerio Público.

El presidente de la Asociación de Fiscales, Pedro Orthusteguy, explica que el principal problema al que se ven enfrentado es que los fiscales no tienen una carrera profesional, y "esto implica que los fiscales que ingresan con un grado, pueden pasar muchos años sin que tengan ninguna oportunidad de ascenso".

Los fiscales parten en grado 9, recibiendo una remuneración de 2.665.926, y pueden optar a un máximo de 3.835.023  pesos brutos, destinados para el grado 6, "y ese grado es muy inferior al de la mayoría de los jueces en Chile que es el grado 5 (y que ganan 4.635.105 pesos), por lo tanto, exite una diferencia de remuneraciones bastante grande entre el fiscal más antiguo del Ministerio Público, con un juez que podría estar recién ejerciendo". (Ver Tabla)

Es por ello, que, según Orthusteguy, cerca del 30 por ciento de los fiscales que migran, se van al Poder Judicial.

La carga de trabajo es otro de los aspectos que molesta a algunos persecutores, pues cuando se implementó la Reforma, el diseño del Ministerio Público contemplaba una carga de 800 causas por fiscal al año. Cifra que hoy se ve aumentada en un 266 por ciento, llegando a revisar, cada fiscal, más de 2100 causas en promedio, anualmente.

Causas que podrían tardar años incluso en ver la luz, si además se considera que actualmente no existe un sistema de suplencia y subrogancia de fiscales. Según Orthusteguy,""hoy día estamos totalmente superados. Nosotros no controlamos los plazos de investigación. La calidad de la investigación es inferior, no podemos atender a toda la gente que quisiéramos atender".

Para el presidente de la Asociación, "hoy día, cada vez hay menos fiscales con antigüedad que puedan asumir causas complejas y ese es un problema de Estado".

Propuesta para el fortalecimiento del Ministerio Público.

"Hay que ponerle un tapón a la tina y evitar que los fiscales se sigan yendo de la institución", dice el fiscal Orthusteguy, quien enfatiza que "para formar un fiscal con experiencia hace falta tener al menos cien juicios en el cuerpo".

Para ello, la Asociación de Fiscales propone medidas concretas que fortalezcan al Ministerio Público, entre ellas la creación de la figura de la subrogancia legal del fiscal adjunto, por parte de un abogado ayudante, y la formación de un equipo mínimo de trabajo, compuesto por un abogado y dos administrativos. Plan que tendría un costo cercano a los 28 millones de dólares.

La idea, dice Orthusteguy, es reemplazar el proyecto de ley enviado por el Gobierno, que descansa en el Parlamento, cuyo costo alcanza los 30 millones de dólares. Proyecto que a su juicio "no sirve al país, y es un gasto de plata innecesario"

Ex fiscal Yuseff: "los fiscales se van porque están desmotivados"

El hasta ayer fiscal de la zona Sur, Juan Yuseff, abandonó el MInisterio Público tras 9 años de ejercicio, en los que permaneció, a su juicio "estancado profesionalmente".

"Yo estoy del 2004 en la fiscalía en grado 8, eso genera falta de espectativas, uno se va desmotivando. Estamos recargados de trabajo y falta de personal", dice Yuseff, quien a partir de hoy formará parte de un estudio particular de abogados.

El ex fiscal, asegura, que la desmotivación es generalizada, "la gente está cansada, éste es un reclamo que viene desde hace tiempo. Por eso que están renunciando, porque están desmotivados".

Para Yuseff, la falta de motivación se suma a la lluvia de críticas que reciben diariamente los fiscales por su labor, o falta de labor investigativa, pero, dice, "a nadie le interesa por qué sucede. Hay colegas que tienen mil quinientas causas, y se hace lo que se puede".

El Fiscal Nacional Sabas Chahuán, dijo comprender la fuga de Fiscales.

Para Chahuán, que cifró la salida de fiscales en 128, "duele que un recurso tan importante como los fiscales se vayan a trabajar a otra parte, pero lo entendemos en el contexto de las dificultades que tenemos con la Ley Orgánica que es muy rígida, que no nos permite seguir una carrera funcionaria".

Según explicó el Fiscal Nacional, los fiscales cuando llegan al grado máximo 6, sólo tienen dos opciones, postular a fiscal regional o ser fiscales jefes. Las jefaturas están determinadas por el número de fiscalías, por tanto no es una opción flexible.