Bennu (pronunciado como "Ben-oo") es el nombre que Michael Puzio, un niño de nueve años de Carolina del Norte (EE.UU.), pensó que era el apodo perfecto para un asteroide que viaja por el espacio. No lo pensó dos veces y envió su proposición al concurso de la Nasa, en cual participaron más de 8 mil propuestas. Cada una de ellas con el propósito de entregar un nombre más amigable y bonito que 199 RQ36. Pero sólo una fue la ganadora. Y esta vez fue la del joven Puzio.

Si bien, nunca pensó que podría ganar, cuando supo que su nombre había sido el seleccionado como el triunfador, quedó impresionado: "Es genial. Soy el primer niño que conozco que nombró algo del sistema solar", comentó el infante. El nombre se le ocurrió porque, según Puzio, el aparato que emprenderá el viaje al asteroide en 2016 se parece al ave mitológica egipcia que tiene ese nombre.

Recordemos que este concurso es parte de la misión Osiris-Rex. Un plan que sobre pasa los $US 800 millones de fondos y que planea estudiar y recolectar información sobre Bennu que, según los trazados realizados por la agencia espacial, podrían colisionar con la tierra en 2182. También, se contempla poder tener mayor información sobre estas piedras primitivas que rondan por el espacio desde el comienzo del universo, hace más de 4 mil 500 millones de años atrás.

"Las muestras que se recolecten de Bennu permitirán a nuestros científicos conocer más sobre el universo, como también explorar un poco más en la historia del mismo", dijo Jason Dworkin, un científico de del Centro de Vuelo Espacial Goddard.