Asteroide Palas: el Peter Pan del espacio




El telescopio Hubble ha permitido una nueva percepción del Palas 2, uno de los asteroides más grandes del sistema solar.

La roca de casi 600 kilómetros de ancho es un ejemplo de un objeto que inició el proceso de convertirse en un planeta, pero que nunca se consolidó como tal.

Los investigadores han publicado, en la revista especializada Science, un modelo en tercera dimensión de Palas.

La información provista por el Hubble hizo posible determinar las características de la superficie, entre las cuales se incluye lo que parece ser un cráter, producto de un contundente impacto.

Se espera que la nueva información ayude a los científicos a profundizar sus conocimientos sobre las primeras fases de la formación de los planetas.

"Palas es una pieza única de un rompecabezas que explica la formación de nuestro sistema solar", indicó la investigadora que coordinó el estudio, Britney Schmidt, de la Universidad de California, en Los Ángeles.

PROCESO
Palas se encuentra a unos 400 millones de kilómetros de distancia del Sol, entre las órbitas de Marte y Júpiter.

Se trata del segundo objeto en ser descubierto en el principal cinturón de asteroides. De ahí que su nombre sea Palas 2.

Sólo Ceres es superior en tamaño (950 kilómetros de diámetro). Otro asteroide, Vesta, tiene una circunferencia más estrecha, aunque es mucho más grande que Palas.

Los tres se pueden considerar "protoplanetas", una concepción que es reforzada por las imágenes captadas a través del Hubble.

De acuerdo con los teóricos, los planetas crecieron a partir de la fusión de polvo y rocas que se encontraban alrededor de las recién nacidas estrellas.

La colisión de esos segmentos de material produjo progresivamente objetos más grandes.

Algunos de ellos se volvieron inmensos y calientes, lo cual fue clave para que experimentaran un proceso de formación de capas en el que los materiales más espesos se movían hacia el centro para formar un núcleo.

En el caso de Palas, este proceso parece haber sido imitado, pero su figura irregular sugiere que nunca fue completado.

"Si se formó un núcleo es algo que no podemos determinar con estas observaciones, pero Palas es lo suficientemente grande y redondo para poder pensar que en su interior se inició el proceso de división", le dijo Schmidt a la BBC.

HISTORIA MOJADA
Las figuras oscuras en las imágenes de Hubble muestran la presencia de minerales hidratados en la superficie del asteroide.

Si Palas se formó en el cinturón de asteroides, probablemente habría incorporado grandes cantidades de agua congelada a su estructura.

Al calentarse la roca, el agua se derritió, lo cual no sólo habría ayudado al proceso de diferenciación, sino a modificar el silicato de la roca para producir la tipología mineralógica.

De acuerdo con la investigadora de California, es muy poco probable que Palas se haya calentado tanto que hubiese derretido el silicato de la roca.

La presencia de abundantes cantidades de agua congelada en el asteroide puede ser clave para explicar su relativa baja densidad (2.400-2.800 metros cúbicos).

La representación tridimensional de Palas fue hecha sobre la base de una serie de fotos instantáneas de su perfil a medida que rotaba frente al telescopio.

INTERÉS
La agencia espacial de Estados Unidos (Nasa por sus siglas en inglés) ha enviado una sonda espacial al cinturón del asteroide para visitar Ceres y Vesta. Palas no está en el recorrido.

Pero Schmidt cree que el interés en los asteroides puede aumentar y espera que "su" protoplaneta pueda convertirse en el objetivo de una misión espacial.

"Estamos cambiando nuestra perspectiva de esos objetos. Cuando hablas de los asteroides, la gente no tiende a pensar en grandes, dinámicos y desarrollados cuerpos, aunque eso es lo que tenemos en el caso de Ceres, Vesta y Palas".

"Intento que la gente piense que (los asteroides) son desde 'grandes rocas a pequeños planetas'", dijo la científica.

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