Tras haberse lesionado el mes pasado, Timothy Kopra entró al Control de Misión renqueando, apoyado en muletas y llamó a los seis astronautas del Discovery para felicitarlos por un "lanzamiento impresionante" y desearles lo mejor. Fue una charla breve e informal que ocurrió cuando los astronautas comenzaban a inspeccionar su nave para detectar cualquier tipo de daño ocasionado en el despegue mientras se dirigían a la estación espacial internacional.
"No te puedo decir lo mucho que deseamos que tú también estuvieras aquí con nosotros", dijo el comandante del Discovery, Steven Lindsey. "Estoy seguro que sabes que siento lo mismo, pero definitivamente creo que estoy allá en espíritu", respondió Kopra.
El astronauta Michael Barratt en broma señaló que Kopra estaba a bordo "de una manera un poco más que en espíritu, pero tendremos que explicar eso cuando regresemos". "Está bien hombre, sigue observándonos ... avísanos si metemos la pata", agregó Barratt.
En un cambio de tripulación fuera de lo común, el astronauta Stephen Bowen tomó el lugar de Kopra. La NASA nunca tuvo que reemplazar a un miembro de la tripulación de un transbordador en fecha tan cercana al lanzamiento, y Bowen tuvo que entrenar prácticamente sin descanso para estar preparado. Realizó dos caminatas espaciales en el viaje anterior de transbordador, en mayo, y el jueves se convirtió en el primer astronauta de la NASA que realiza misiones consecutivas.
Como principal caminante espacial de la tripulación, Kopra, de 47 años, ayudó a desarrollar los procedimientos para el par de excursiones de la próxima semana fuera de la estación espacial. Ayudará con las caminatas espaciales desde el Control de Misión.