Se hace cada día más sombrío el escenario de las elecciones presidenciales previstas para el próximo 5 de abril, por los repetidos ataques de grupos armados, sobre todo de los talibanes, que reivindicaron el ataque en el Hotel Serena de Kabul, donde murieron 13 personas.
En el sofisticado hotel, frecuentado por políticos y por personalidades "top" afganas y extranjeras, murieron trece personas, entre ellas cinco afganos y varios extranjeros: dos canadienses, un neozelandés, un indio, un paquistaní y un diplomático diplomático paraguayo.
Entre los muertos está Sardar Ahmad, periodista afgano en el equipo de la Agencia France Presse, quien perdió la vida en medio de los disparos junto con su esposa y sus dos hijos.
Los mensajes de condolencias de colegas periodistas se multiplicaron a lo largo del día ante la brutal muerte del periodista de 40 años, pilar de la oficina de la AFP en Kabul. Ahmad también era propietario fundador de la sociedad de servicios para la información Kabul Pressistan, utilizada por muchos periodistas extranjeros.
Los atacantes lograron entrar en el hotel Serena, que tiene un puntilloso sistema de seguridad, con cuatro pistolas de pequeño calibre, y se presentaron como clientes que deseaban cenar. Asi, los jóvenes, que escondían sus armas en los calcetines, consiguieron burlar todas las medidas de seguridad en el hotel, uno de los más prestigiosos en la capital afgana, el jueves por la noche.
Una vez dentro abrieron fuego, primero contra el diputado Habib Afghan, quien estaba cenando.
El viceministro del Interior, general Ayub Salangi, indicó que dos miembros de las fuerzas especiales afganas resultaron heridos en el enfrentamiento armado con los talibanes.
El asesinato de Ahmad y de sus familiares por parte de "enemigos del pueblo afgano", fue condenado por el presidente Hamid Karzai.
El mandatario añadió que lo sucedido en el Hotel Serena es "un crimen enorme y una dolorosa tragedia".
EX DIPLOMÁTICO PARAGUAYO
De acuerdo con el canciller paraguayo Eladio Loizaga, un ex diplomático paraguayo fue una de las víctimas del atentado.
En reunión con periodistas, Loizaga dijo que Luis María Duarte, abogado de 39 años y ex funcionario del ministerio de Relaciones Exteriores se encontraba en Afganistán trabajando para la organización no gubernamental National Democratic Institute, con sede en Washington, haciendo observaciones para las elecciones del 5 de abril.
Previamente había trabajado en la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, dijo el canciller, y añadió que "dimos instrucciones a nuestra embajada en Nueva Delhi para que realice gestiones a fin de repatriar sus restos a través de la embajada de Brasil en Kabul".
El gobierno de Paraguay condenó el ataque contra el Hotel. "El Ministerio de Relaciones Exteriores expresa, en nombre del Gobierno y pueblo paraguayo, su rechazo y más enérgica condena por el cobarde ataque terrorista perpetrado el día de ayer (jueves) contra inocentes civiles, incluyendo niños", aseveró la cancillería en un comunicado, agregando "sentidas condolencias del Gobierno y Pueblo paraguayo a los familiares del Señor Duarte y los acompaña solidariamente en este difícil trance", dijo.
Este atentado, reivindicado por el vocero de los talibanes, Zabihullah Mujahid, sumó más incertidumbre y sensación de inseguridad al clima de las elecciones que se realizarán dentro de dos semanas.
Los cuatro atacantes también murieron a manos de las fuerzas de seguridad, información que fue confirmada hoy por los talibanes.
"Cuatro atacantes mártires equipados por armas automáticas, bombas de mano y potentes explosivos entraron a las 21 en el hotel frecuentado por extranjeros y lanzaron una operación de tres horas".
Hacia la medianoche, prosiguió el comunicado, "los cuatro resultaron martirizados tras haber matado a 22 invasores extranjeros y títeres afganos".